La Fábrica de la Mirada(*)
Por. Ruby Rumié, Artista
El Rinoceronte de Durero es el nombre que recibe un grabado creado por el grabador y pintor alemán, Alberto Durero en 1515. Esta imagen se basaba en la descripción escrita y su boceto, realizado por un artista desconocido, de un rinoceronte indio que había llegado a Lisboa. Durero, nunca vería al rinoceronte real ya que este animal murió al naufragar el barco que lo transportaba a Italia a principios de 1516 y no se volvería a ver un rinoceronte vivo en Europa hasta 1579 donde llegó un segundo ejemplar a la corte de Felipe II en España.
A pesar de las imprecisiones anatómicas, este grabado gozó de gran popularidad en Europa y fue copiado en muchas ocasiones durante los tres siglos siguientes, considerado una representación fiable de un rinoceronte hasta finales del siglo XVIII.
Sobre el grabado de Durero se ha dicho que: “Probablemente ninguna otra pintura de un animal ha ejercido una influencia tan grande en las artes”.(1). La visión es, sin duda, una de las fuentes de información más utilizada por los seres vivos para conectar con el mundo exterior, sin embargo, podemos también aprender a mirar a través de los otros sentidos, como fue el caso de Durero, que le sirvió de base la información escrita y su boceto recibido de un colega desconocido.
Mirar no es exactamente ver como escuchar no es sinónimo de oír. Anne Sauvageot (1994), analiza tres momentos en la mirada occidental: la época griega, el renacimiento y la actual. Según la autora, en la Grecia antigua, la mirada fue un acto mas táctil que óptico, donde el ojo palpaba los objetos a la distancia. En el Renacimiento, con la invención de la perspectiva lineal que creó una cierta racionalización de la mirada al recrear la profundidad y la posición relativa de los objetos, parece seguir dominando nuestra manera de pensar y mirar hoy en día.
Sin embargo, para estos últimos tiempos, Sauvageot considera que el ojo humano está sometido a una aceleración radical de los estímulos que lo asaltan y bajo esta presión, nuestra visión tendría a reanudar con una sensorialidad auditiva y tactilomuscular que había sido descartada por los imperativos de la racionalidad cartesiana. Hoy en día nuestros sentidos están confrontados cada día de manera más aguda al reto de la velocidad: “de un mundo de las cosas hemos pasado a un mundo de las acciones que el ojo mediatiza a través de un proceso de desrealización creciente” (Sauvageot, 1994: 182), lo cual plantea una nueva manera de percibir la realidad (2).
"La Fábrica de la Mirada", es un taller experimental que busca incentivar a los alumnos a encontrar nuevas maneras perceptivas de mirar, pretendiendo potenciar esta por medio de ejercicios (corporales-sensoriales), teniendo como hilo conductor, a otros sentidos como son el tacto y el oído.
Para complementar estos ejercicios, se les ofrecerá una introducción, a manera de resumen teórico, sobre la evolución de la visión a lo largo de los tiempos, vinculando esta al conocimiento.
Notas:
(1) http://es.wikipedia.org/wiki/Rinoceronte_de_Durero
(2) Para más detalle sobre las nuevas maneras de espacializar y de representarse las cosas, ver las páginas 221 a 223 de su libro, así como Regis Debray (1992) que intenta cernir los códigos invisibles de lo visible. Si este autor reconoce que resulta imposible conocer del todo nuestra manera de ver, ya que siempre se encuentra algunas zonas de sombras, quiso sin embargo poner en evidencia algunos de los prejuicios del ojo occidental. http://www.euskomedia.org/PDFAnlt/antropologia/11/05/05065079.pdf
(*) Fundamentación y descripción del taller. Ruby Rumié, Artista. www.rubyrumie.cl
Taller: "La Fábrica de la Mirada". 3 y 4 de mayo, de 9:00 a.m. a 1:00 p.m. y de 2:00 p.m. a 6:00 p.m. Área Cultural, Banco de la República, Sucursal Bucaramanga, Carrera 19 No. 34 - 47/93. Teléfonos (7) 630 31 33. Exts: 7007, 7008, 7011, 7012. (Imagen proporcianada por la tallerista)
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