martes, 3 de octubre de 2023

OTRAS NATURALEZAS

Una mirada al paisaje urbano desde la cultura popular, sus estéticas y usos sociales. Proyecto de Fotografía



Por. Víctor Hugo 

Al deambular en la retícula urbana y sus complejos entramados, donde nos disputamos la posesión de los espacios, esos lugares aparentemente deshabitados de su continente, de inexistentes significados, dan cuenta de las luchas sociales y las resistencias; de lo abyecto y lo poético, pero también de las burlas y mentiras que desde el poder alimentan las exclusiones y crean los silenciosos esclavos en los que nos han convertido camino a la muerte, imponiendo una forma de ser y ocupar; de sentir y perecer. 

Estos gestos visuales que nos encontramos a diario y a la deriva, interpelan al transeúnte y nos narra su historia y con ella redescubrimos nuestra propia realidad; sin embargo, no son el resultado de intenciones estéticas ni de un acto profundamente reflexivo y cerebral, sino de las coincidencias o azares; necesidades o funciones, con la que le damos respuesta al alucinante e hipotético futuro y enfrentamos esta decadencia ignominiosa y obscena que nos condena invariablemente a este suicidio colectivo al que lentamente nos están llevando para ser devorados por el agujero negro de los fascistas que permanentemente nos recuerdan quienes son los que tienen el poder.

lunes, 13 de febrero de 2023

SAN VALENTÍN: FUE SOLO UN SUEÑO:

Es el amor, y no la razón, lo que es más fuerte que la muerte
Thomas Mann 


Cuando te vi, me enamoré. Y tu sonreíste porque lo supiste. 
William Shakespeare


La calle sueña en la mirada del transeúnte su propia mentira, pero el espejo se resiste a levantar sus ojos para encontrarse con el otro; simplemente escapa mientras cae a pedazos el aliento de tu lluvia, aun así, su humedad impregna la última de sus historias, esa de olor a naftalina, telarañas alevosas y baúl viejo; las que se esconden por vergüenza al que dirán de los amigos y la acuciosa inspección de tu madre. 

Afuera, en tu esquina, bajo el árbol, te dejé las sombras de los demás, de los que se pasearon frente a tu ventana y te dejaron las sábanas almidonadas y este burdel de sonrisas desnudas bajo la cama. 

Adentro, el destino herido se aventura a barajar la realidad para acomodar sus respuestas; luego, le prende una vela más a la duda y la otra a sus demonios, para que no pierdan el camino de regreso. En la puerta, cualquier hora espera ansiosa y anuda su ábaco de andanzas a la cintura, ahora que el último nunca llegó a la fila; pero, antes de partir, tu olor a carne oreada se disipa con aceite de lavanda y papel moneda, porque a pesar de sus esfuerzos, su oración nace muerta como conjuro de magia negra o sortilegio de cama vacía.  

Recuerda, que en cada paso ciego se detiene el aliento y los caminos cruzados, esos con los que sigues infectando la vida y apúrate que detrás de ti viene una sombra nueva, otro rostro oculto y el monedero abierto.