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domingo, 1 de diciembre de 2024

VIDEOARTE: EN BARRANCABERMEJA, VI FESTIVAL DE TEATRO CRÓNICAS DE PAZ

Otras lecturas 

De donde vengo voy para verte partir 
en las señales ajenas de la piel 
 donde susurra el firmamento 

A partir de la puesta en escena de la obra "Crecimos en Paz", reelaboramos nuestra historia porque nada está lejos de este fugaz aliento que nos mantiene despiertos y alucinando fachadas para decorar nuestras vidas. 

El VI Festival de Teatro Crónicas de Paz, organizado de forma independiente por A Ver Teatro, bajo la producción general de Paula López, concluye hoy domingo 1 de diciembre con dos nuevas presentaciones a las 6:30 de la tarde en la Casa del Libro Total de Barrancabermeja. 

 

Fotografía: ©ArtistasZona, Diciembre, 2024.

martes, 19 de noviembre de 2024

PRAEMIUM IMPERIALE 2024 PARA LA ESCULTORA COLOMBIANA DORIS SALCEDO

"El simple hecho de que el arte exista es un triunfo sobre la muerte. El arte es un triunfo sobre la violencia porque requiere que haya alguien apreciando la vida. El arte puede devolvernos la dignidad y la humanidad. Así que creo que ha cambiado a la sociedad y puede cambiarla", así lo manifestó la artista plástica colombiana Doris Salcedo este martes 18 de noviembre durante la rueda de prensa que se realizó en Tokio minutos antes de recibir el Praemium Imperiale de 2024

El Praemium Imperiale (Premio Mundial de Cultura en memoria del príncipe Takamatsu) es un reconocimiento internacional que se entrega desde 1989 en nombre de la Asociación de Arte de Japón dirigido a creadores en los campos de la pintura, escultura, arquitectura, música, teatro y cine. 

Finalmente, la escultora indicó: "Lo recibo como un reconocimiento de las experiencias ofrecidas por miles de víctimas de violencia política en Colombia y alrededor del mundo".

jueves, 29 de agosto de 2024

EN BARRANCABERMEJA, LAS RUINAS DE LO QUE SOMOS

 

La fotografía captura una noción de mundo objetivado a través de la mirada antropocéntrica, mediada por el artificio tecnológico, la cámara; en esa perspectiva me interesa abordar la polifonía de voces, silencios y lutos que transitan en los territorios, entre sus bordes e intersticios; esas miradas modeladas por las nociones de actualidad y realidad, producidas por la avalancha mediática, sus estrategias de falseamiento y la dislocación con el tiempo. 

Por otro lado, presentar una versión de esta realidad disruptiva; de ahí que registró y produzco imágenes que señalan no solo mundos idealizados o abyectos, sino esos infinitos multiplicados en cada ausencia huérfana, donde el significado de la vida huele a rastro y huella. 

En este sentido, mi trabajo no es el gesto contemplativo de la tradición judeocristiana occidental o las posturas la zen; tampoco, queda atrapado por la indiferencia o la arrogancia del silencio, como acto de contrición frente a los discursos del poder, porque indaga y acecha. ¿Acaso no es para eso el arte? 

Por eso, entiendo la fotografía como un desafío: la luz se niega a ser un simple reflejo, establece nuevos sentidos y toma cuerpo en el eco producido por las realidades, convirtiéndola en esa resonancia donde se construye su expresión, mientras el lenguaje se deshace en imágenes que intentan impedir su propia objeción. En la contemporaneidad, nada está a la deriva de su singularidad. 

En momentos en los que se comenzó a hablar de posnaturaleza y en medio de la crisis climática que tiene al borde de la extinción la vida en el planeta, el aforismo de Heráclito podría revelar de alguna manera los anacrónicos conceptos que siguen siendo los soportes sobre los cuales se fundó la idea de civilización y con ella la de progreso. Este hecho lo vemos a diario en las ciudades donde podríamos preguntarnos antes que enunciar: ¿La naturaleza ama esconderse? Por eso, las imágenes buscan indagar sobre lo que hoy para nosotros significa nuestra relación con esta distópica realidad, cuando lo que hacemos es tomar distancia de ella, hasta esconderla detrás de los muros y ruinas de lo que somos, tal como lo señaló la antropóloga Anna Tsing: "Las ruinas son hoy nuestros jardines". Así es esta ciudad mientras su alcalde Jonathan Stivel Váquez Gómez y el Distrito miran para otro lado.
Fotografía: Serie ¿La naturaleza ama esconderse? ©ArtistasZona, Barrancabermeja, 2024.

martes, 27 de agosto de 2024

EN BARRANCABERMEJA, LA MIRADA DEL OTRO: SIMBIOGENÉSIS CULTURAL


En homenaje Ismael Jaimes Córtes 
Al humor político de Don Gastón y Don Erario 
Opinión del Magdalena Medio 

Voy de donde vengo para verte partir 
en las señales ajenas de la piel 
donde susurra el firmamento 
 cuando nos atrevemos y navegamos al revés 

Generalmente proyectamos en el otro los sinuosos laberintos que nos persiguen y nos atan hasta el delirio de la persecución esquizoide. Esos fantasmas y sus tormentos son el primer espejismo que observamos en la mirada de quien se cruza frente a nosotros. 

Así es esta sociedad, llena de afanosas disputas: unos por despojarse de sus harapos y otros por colgarle a los demás eso que odian de si mismos e intentan ocultar. Esta vieja tesis del psicoanálisis, podría diagnosticar esta hipermodernidad como lo diría el sociólogo francés Gilles Lipovetsky, y en la que todos seguimos siendo culpables. Por esta razón, muchos están más preocupados en parecer que ser, porque fingir y simular es la regla socialmente aceptada y políticamente correcta. 

Para completar, explorar la realidad lejos de la orgía concupiscente que amalgama política y religión no es tarea fácil cuando la obstinación corroe hasta los imaginarios colectivos, los dogmas y algunos no superan el trauma sadomasoquista de la guerra, el odio inoculado por Álvaro Uribe Vélez y la seductora formula de la cultura traqueta de la emprendedora “gente de bien” que señala: la única forma de enriquecerse fácilmente siempre será lo ilícito, poner en venta la dignidad y privilegiar la tradición Moloch de sacrificar a los demás cuando se oponen a su victoria. Por eso, será que les encantan los vallenatos pendencieros que repiten los refranes populares: "el vivo vive del bobo…" y el político de su clientela, esa es la tesis ética, estética y cultural que actualmente orienta esta ciudad. 


Simbiogenésis 

“Nuestros cerebros de mamíferos evolucionaron y crecieron sobre un andamiaje de cerebro reptiliano. En lo profundo de nuestros cráneos tenemos el cerebro de los cocodrilos […] Los dragones de nuestros cerebros primitivos aún acechan en las profundidades de nuestras mentes, incluyendo en nuestro comportamiento”, señaló Carl Sagan en su libro “The Dragons of Eden”, cuando apeló al documentado proceso de simbogenésis de Lynn Margulis. Aunque esta hipótesis fue desestimada por los estudios de neuroanatomía evolutiva comparada en el año 2000. 

Quizás la perspectiva de Sagan nos sirva como una metáfora en nuestro rapaz presente y podría señalar que ciertos procesos de simbiogénesis cultural podrían constituir el presente del ser barranqueño contemporáneo que se debate entre el petróleo y la arepa paisa; la cultura traqueta paisa y la nostálgica que produce en el imaginario lo que significó construir esta ciudad. ¿Por qué Barrancabermeja pasó de ser la ciudad dialogante de los colores primarios a pleno sol a un territorio oscuro de los tímidos y nada estimulantes pasteles; además, de ser silenciada por sus mafias invisibles y no por las que se encuentran en el poder? 

Si especulamos sobre este punto, es posible que la respuesta la tenga Terence McKenna y su alucinante teoría de la novedad en la que propone que el universo evoluciona hacia una mayor novedad y complejidad que va a culminar en un punto omega del universo, es decir, de trascendencia, suponía el biólogo, al tiempo que reconocía que esta perspectiva era seudocientífica. 

Sin embargo, para nuestro caso si desplazamos el concepto de la ambiciosa novedad para la clase política en este momento, sobre su horizonte no podría haber mejor escenario y ni dibujarse el más deseable de los sueños para los negocios del poder promovidos por el mismo Narco-Estado que estaba empotrado en la Casa de Nariño. 

Fue durante la presidencia de Álvaro Uribe Vélez que se propuso conformar la Unidad de Planeación del centro oriente con los departamentos de Antioquia, Santander y Norte y así perdimos nuestro territorio porque culturalmente no compartíamos nada, quizás en narco corrido mexicano que hoy llaman música urbana y que habían impuesto los paramilitares en el Magdalena Medio, pero necesitaban acceso al agua, los minerales y el mercado. 

Sin embargo, para nuestro caso, si desplazamos el concepto de la ambiciosa novedad para la clase política en este momento, sobre su horizonte no podría haber un escenario mejor y más deseable para los negocios del poder promovidos por el mismo Narco-Estado que estaba empotrado en la Casa de Nariño. 

Durante la presidencia de Álvaro Uribe Vélez, se propuso conformar la Unidad de Planeación del centro oriente con los departamentos de Antioquia, Santander y Norte de Santander, y así perdimos nuestro territorio porque culturalmente no compartíamos nada, excepto el narco corrido mexicano que hoy llaman música urbana que los paramilitares habían impuesto como parte fundante del imaginario colectivo en el Magdalena Medio, pero ellos necesitaban acceso al agua, los minerales y los mercados de la frontera. Y la estocada final nos la dio el exgobernador Horacio Serpa Uribe que vendió uno de los activos más importantes del departamento la Empresa Electrificadora de los santandereanos y nos dejó a disposición de los devenires de la política paisa y de paso no convirtió en esclavos a todos los que somos oriundo de esta tierra. 

La jugadita, que no encontró resistencia en ningún estamento de la sociedad, entre ellos la academia que impertérrita se dejó devorar por el Plan de Desarrollo "Hacia un Estado Comunitario" de Uribe Vélez, que como cualquier acto de fascismo intenta esconder sus intenciones a punta de eufemismos, mientras anclaba el desarrollo de nuestros departamentos al de Antioquia, ya que sus negocios necesitaban de otra salida rápida al Atlántico hacia los paraísos fiscales de las Antillas Menores, para poner no solo droga sino la producción del oriente antioqueño en el puerto de Maracaibo; tal vez por eso como lo señaló McKena la historia del universo es la historia de la emergencia de la novedad. 

La jurásica burocracia 

Por eso, entender las realidades de Barrancabermeja lejos de las pasiones políticas y el cúmulo(*) de mentiras en los discursos, tanto de sus líderes políticos como de los funcionarios de la administración distrital como del Secretario de Cultura, Turismo y Patrimonio Alexis Guerrero Sánchez(caso que abordaré en otro artículo), comienza a desentrañarse en el escenario donde se abren paso como clase social emergente, quienes hoy insisten denodadamente por mantenerse en el poder. Esta significativa y efímera burocracia crece como la espuma en el mar, pero llega para llevárselo todo, eso sí con cargo al presupuesto del ente territorial. Así lo demuestran las regalías, en las que el Distrito está sancionado por el "manejo no adecuado" y ahora se reveló que se encuentran perdidos alrededor de 335 mil millones en el nuevo escándalo de corrupción de los 12 billones desaparecidos de los recursos públicos del país denunciado por el Gobierno Nacional. 

De tal forma que aplican en toda regla el principio que sentenció el pintor norteamericano y máximo exponente del pop art, Andy Warhol: "De ahora en adelante todos, sin excepción, tendrán derecho a sus quince minutos de fama"; sin embargo, en Barrancabermeja le agregaron: "y de imperturbable depredación". 

Esas rutilantes estrellas del periodo del narcdéco [Referencia al Art Decó] que vive actualmente la ciudad, aparecen a velocidades supersónicas (Mach 1=1,235.52 km/h.) igual que cualquier figura del entretenimiento hasta llegar a su máxima exposición, a su cenit, si la desgracia de quedar al descubierto no los atrapa; aunque es improbable cuando los medios de información hacen parte del mismo cartel y lo único que importa es sobrevivir, así haya que recurrir al manual para la supervivencia de Emil Cioran, 

No obstante, no puede haber burócrata sin su contratista; esta segunda especie de la jurásica fauna barranqueña concentra el verdadero poder y presuntamente se comporta como un cartel (los operadores); muchos de ellos muy populares y prominentes en la ciudad, otros vienen de Bucaramanga, Medellín o Valledupar. 

Por otro lado, existen versiones coincidentes que los responsabilizan de poner los alcaldes de los últimos 24 años a los mismo cinco de siempre. En este sentido, hay quienes se aventuran a indicar, como se menciona abiertamente en los mentideros políticos del puerto petrolero, que ellos aportan los recursos para la campaña y, sobre todo, para sobrevivir el día de las elecciones a punta de la presunta compra de votos, hechos por los que en la actualidad se investigan al actual alcalde Distrital Jonathan Stivel Vásquez Gómez; mientras que otros opinan que la gran cantidad de dinero que deambuló en las calles de la ciudad, como supuestamente ocurrió el pasado 28 de octubre de 2022, provino de Valledupar. Conjeturas o no, este es el secreto a voces más debatido tinto tras tinto que se espera resuelva la Fiscalía General de la Nación en los próximos meses. 

La misericordiosa caridad 

El axioma estima que, mientras la burocracia es efervescente y fugaz, los contratistas perduran. En este entramado surge la flotante clase emergente (invisible o no) responsable en buena parte de mantener el voraz fanatismo en la ciudad, porque el que reza y peca empata, dice el refrán. Por eso, los vemos entrar sagradamente a los ruidosos servicios religiosos con su diezmo en la mano. 

En algún momento de su vida durante el siglo XVIII o «siglo de las luces» y en plena Ilustración el filósofo francés Francois Marie Arouet, conocido como Voltaire, apunto: “Si Dios no existiera, sería necesario inventarlo”, pero si Dios no existiera los barranqueños lo hubieran inventado, no por una conclusión fáctica de tipo arqueológica o fruto de una elevada discusión teológica, sino por una necesidad de control social y de imposición de la cultura mafiosa. 

Hoy uno de los negocios más lucrativos en estos momentos en Barrancabermeja es ser pastor de cualquier confesión religiosa desprendida de la Reforma Protestante del siglo XVI propiciada por el fraile católico Martín Lutero, quizás esta parte de la historia la olviden los mercaderes de la fe, porque nadie puede odiar más a otro que un protestante convencido que él es el camino, la verdad y la vida (Juan 14:6), al tiempo que segregando la sociedad y destruyen de paso a familias enteras con la palabra de Dios. 

Pero no solo se trata de tener la intención o la iluminación de los maestros iniciados, también se recomienda hacer un estudio de mercado y ubicar muy bien la botica del único fármaco que no se empaca, pero dopa igual que lo hace una sustancia psicoactiva, como expresión de una espiritualidad que jamás responderá a una perspectiva de la ética pero sí proporciona a su feligresía la experiencia de trance o del famoso estado alterado de conciencia. 

Además, es obligatorio practicar el bien reconfortante bálsamo de la misericordiosa caridad que nos hace olvidar los esclavos que sometemos, de las mentiras que echamos, de lo que nos robamos del erario público y funciona muy bien como estrategia electoral, porque es necesario liberar al "Alma Cautiva" muy al estilo del pintor simbolista Elihu Vedder; aunque también podría ser a través del peculiar clímax de Sor Juana Inés de la Cruz

No obstante, no olvide conservar su dependencia aumentando paulatinamente las dosis del acto ritual de la iglesia. Todos estos ejercicios espirituales se pueden reforzar con la famosa literatura de autoayuda o literatura basura, muy popular desde la llamada Nueva Era del siglo XX y que ha mantenido la industria editorial por altos dividendos que deja su creciente consumo, así lo demuestran famosos coaches como Pablo Coelho, Carlos Cuauhtémoc Sánchez y el aclamado autor Michael A. Singer, por nombrar unos cuantos, lecciones que se repiten como mantras o se imitan como mándalas. 

A pesar de ello y para defenderse de cualquier ataque espiritual y del poderoso enemigo de los avernos, aprendieron algo de la cosmología y a usar los encadenamientos cuánticos y hoy hacen una especie de mezcla teosófica de las bondades que fluctúan entre las teorías de Hermes Trismegisto, el Conde de Saint Germain, las posturas tibetanas, taoístas, hinduistas, de las prácticas ayurvédicas y hasta de la famosa Tabla Esmeralda, para que no quede ninguna duda que la búsqueda experimentar el trance divino. 

Por otro lado, muy a pesar de los ortodoxos pastores, sacerdotes, abades, frailes o hermanos, la religión dejó de ser solo una cuestión de fe, porque si el negocio no avanza al ritmo de los tiempos se quiebra en occidente. De hecho, hoy se sirve de los modelos más interesantes de la cosmología como argumento de su teoría del diseño inteligente, todos ellos sujetos a los avances de los patrones matemáticos que los demuestren y a los descubrimientos del Gran Colisionador de Hadrones o LHC (siglas en inglés de Large Hadron Collider): un acelerador protón-protón de 27 km desarrollado entre 1989 y 2001, que se encuentra ubicado bajo tierra entre las fronteras de Francia y Suiza, cerca de Ginebra. 

En este mismo sentido, esa idea de las dimensiones que hasta el momento va en la Teoría de la Cuerdas o la llamada cosmología de las branas, que nos plantea seriamente los mundos paralelos y los límites concretos del universo, sorprendentemente narrados en el programa "Dimensión Desconocida" que transmitía la televisión colombiana en blanco y negro durante los años 70, dejó de ser un concepto futurista que tiene sus antecedentes en los desarrollos matemáticos de Bernhardt Riemann, quien en 1854, a partir de la geometría, señaló que podían existir más de tres (3) dimensiones. 

Luego, años más tarde, otro matemático, Charles Howard Hinton, diseñó el teseracto, mientras el arte también especulaba y se planteaba preguntas “dimensionales” a su presente a través de obras como las de Oscar Wilde, Marcel Proust y Herbert George Wells. Al mismo tiempo, en los albores del siglo XX, los pintores Jean Metzinger, Albert Gleizes, Jacques Villon, Louis Marcoussis, André Lhote, Fernand Léger y, más tarde, Georges Braque, Juan Gris y Pablo Picasso se ocuparon de representar las dimensiones, preocupación que ya había explorado Paul Cezane en sus investigaciones sobre la percepción. Sin embargo, en Barrancabermeja seguimos repitiendo el catecismo de la cultura mafiosa paisa, que se expresa en algunas proyectos donde lo único que importa es la dimensión del presupuesto. 

Las última palabras 

Quizás Barrancabermeja sea un territorio maldecido por Dios, como para no perder la costumbre judeocristiana occidental, argumento de doble propósito que podría funcionar como estrategia de fidelización y shock para la "noble" labor de control social que cumple la religión en cualquier sociedad y muy lejos de la preocupación ética. 

Estas mismas confesiones religiosas siempre han respondido a los postulados de la ultraderecha colombiana, como lo demostraron las investigaciones de la Comisión de la Verdad y como ocurrió en el Caribe colombiano, muchas de sus iglesias o templos fueron construidos con recursos del narcoparamilitarismo. 

Por un lado, durante mucho tiempo fluyó petróleo de sus entrañas y, por otro, su estratégica ubicación la convirtió en un cruce de caminos perfecto y obligado de las economías ilícitas, muy utilizada hoy por los narcos invisibles que escogieron a la ciudad como su vividero. Esta es su otra maldición. Pobre Barrancabermeja, tan lejos de Dios y tan cerca de Medellín, para parafrasear la sentencia de José Nemesio García Naranjo y que se le atribuye a Porfirio Díaz: "¡Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos!"

A pesar de ello, Barrancabermeja respira moribunda bajo la espesa bruma de las tóxicas cortinas de humo que usan diariamente como fachadas para simular que todo tiene sentido, en medio de una economía asediada y evanescente que es controlada por una red de contratistas y una permanente burbuja creada por los narcos invisibles que lo compran todo. 

Para rematar, Barrancabermeja está cercada por la cultura traqueta que los migrantes paisas impusieron en la ciudad; mientras que la mayoría de su gente no logra superar el trauma sadomasoquista que nos dejó la guerra, el odio inoculado por Álvaro Uribe Vélez, el Centro Democrático y los orgullosos movimientos "Cívicos", que son un eufemismo más de la política local para exorcizar incluso sus discursos. Por eso, voy de donde vengo para verte partir a esta hora de la muerte. 

(*) Cuando hablamos de cúmulos, no solo nos referimos a la cantidad, sino también a uno de los mitos más inquietantes de la tradición Celta, que aún merece la atención de los irlandeses. Los cúmulos aparecen en los bosques como montículos o círculos hieráticos poblados de una espesa vegetación, donde los dioses Tuatha Dé Danann guardan sus tesoros. Además, se ha atestiguado que son custodiados por misteriosas luces, que persiguen hasta la muerte a quienes los perturben o se atrevan a saquearlos. En el texto, los utilizamos como metáfora, dado que la administración Distrital también tiene sus propios guardianes, que suelen perseguir a aquellos que se atreven a interpelar sus discursos y dejar en evidencia sus mentiras. Todos lo saben, por lo que nadie del movimiento cultural desea caer en desgracia ante la clase política que hoy tiene el poder. 



Fotografía: “Serie En la mirada del otro” ©ArtistasZona, agosto 2024.

jueves, 2 de mayo de 2024

EN BARRANCABERMEJA, PAISAJES CONSTRUIDOS Y SUJETOS IMPLICADOS

 

El paisaje no es solo el territorio continente habitado por un sistema de órganos ordenados y dispuestos como un patrón donde todo encaja (ese ordo o secuencia de colocación formal, armoniosa o sustentable que le llamamos ecosistema); ni una simple realidad extendida en continuo movimiento, que revela una función propia y tiene un inevitable ciclo; ese donde habita la estructura sociopolítica de la horda y es construido bajo la intensidad de su mirada.

También esa superficie es más que el inhóspito, profuso y desconocido mundo para la conservación; territorio que modelamos como el escenario del intercambio simbólico, de esos arquetipos que ancla y le da sentido a las formas y rituales que hemos creado como sociedad y con la que nos relacionamos con él, porque emerge del reconocimiento de la mirada al elegir hacia donde la dirigimos y qué delimitamos con en ella.

Ahora bien, desde el idealismo kantiano se propuso que el acto de conocer es el resultado de cierto vinculo entre el sujeto - el objeto y en esa relación unívoca se produce el conocimiento; recordemos que Kant también habló del terror estremecedor que se siente frente a la naturaleza. No obstante, el shan shui (agua-montaña), palabra que se idearon los chinos del siglo V durante la dinastía Liu Song, para describir la representación del paisaje en la muy popular pintura taoísta de ese momento, nos revela un sujeto absolutamente contemplativo como búsqueda del ser.

Por su parte, en occidente, se referían a los “bellos pedazos de país” como lo señaló el pintor y tratadista del Barroco de origen italiano Vicente Carducho (Florencia; 1576 - Madrid; 1638); mientras algunos lo percibían como eso que está lejos, un “ornamento y sin necesidad”, así lo describe el reconocido humanista español Alonso López “Pinciano” (1547-1627). Posteriormente, este concepto sería abordado plenamente en el renacimiento italiano.

Frente a la aparición de la palabra “paisaje” existen muchas versiones; en este punto algunos indican que es muy probable que surgiera en 1708 en la novela “La Gitanilla” del gran Miguel de Cervantes Saavedra, al describir sus impresiones de la ciudad italiana de Flandes, que luego bajo el pincel del pintor flamenco Joachim Patinir comenzaría a materializarse la representación sobre el paisaje, por nombrar uno y ni que decir de las obras del holandés Johannes Vermeer van Delft o el veneciano Giovanni Antonio Canal (Canelleto).

Hoy, bajo la mirada del eurocentrismo se señala como el origen etimológico al galicismo “paysage” y lo ubica en el s. XVIII; por su parte, los holandeses y los anglosajones asumen el vocablo “landscape”, pero para los alemanes surge el término “landschaft” y los italianos no se quedan atrás y apuntan al “paesaggio”.

Dentro de la contemporaneidad una destacadas tendencia que explora el paisaje es el land art o earth art, con sus esculturas site-specific, que emergió a finales del 1960; este llamado arte de la tierra o ambiental, escenifica intervenciones efímeras sobre el paisaje, muchas de ellas con elementos encontrados en su entorno. Robert Smithson, Nancy Holt, Christo y Jeanne-Claude, Andy Goldsworthy, Richard Long, Michael Heizer, Olafur Eliasson, Eberhard Bosslet, Walter De María, Nicolás García Uriburu, Michael Heizer y Agustín Ibarrola, son algunos de sus artistas.

Entre garzas y las iguanas, lo iconográfico

En Barrancabermeja que vive bajo las imposiciones de sus bubble filter, hay una profunda fascinación para las garzas, quizás su estilizada figura, su particular forma de caminar en la orilla del río y cómo se relacionan con los porteños ha generado en los barranqueños cierta atracción por ellas; por esta razón, se podría señalar que uno (1) de cada cinco hogares hay alguna imagen u objeto artesanal que las representa.

Igual ocurre con las iguanas, tanto así que frente al céntrico parque Uribe había un establecimiento comercial que llevaba su nombre y era muy visitado al caer la calurosa tarde barranqueña; en este popular lugar de encuentro donde solo se escuchaba la deliciosa salsa se podía divisar lo que era el Caño Cardales y observar como con el cadencioso andar de este reptil, endémico de Centro y Suramérica, se paseaban entre las ceibas.

Sin embargo, solo hasta después del 23 de julio de 2007, cuando el uribista ultraconservador, vinculado a los escandalosos hechos de corrupción que se presentaron durante el montaje de la Refinería de Cartagena (Reficar) donde se perdieron más de 8.000 mil millones de dólares, y quien era el presidente de Ecopetrol por esa época, Javier Genaro Gutiérrez Pemberthy, fue cuando se adoptó el icono de la iguana como imagen corporativa de la empresa y se popularizó rápidamente en el puerto petrolero.

Por lo que hoy, los artistas barranqueños se apropiaron de esta iguana y las pintan por doquier, sin que medie ningún tipo de investigación histórica, de las posibles lecturas interpretativas o connotaciones ni cuestionarse el por qué de su uso; mucho menos por resignificarlas, al tiempo que decidieron abandonar la búsqueda de nuevas representaciones o estrategias de presentación de la iguana como icono. 

Ver artículo: ¿Street art en Barrancabermeja? 

En este contexto se advierte el hecho, que fue adoptado rápidamente por los barranqueños, después de la amplia inversión publicitaria desplegada por Ecopetrol, empresa que nos pertenecía a todos y fue arrancada del alma de los colombianos por Álvaro Uribe Vélez para privatizarla; ella buscó valorar su nueva marca, al tiempo que escondía una historia espeluznante, pero que le sirvió para lavar su imagen y adoptar una postura ambientalista, igual como hizo con el abandonado “Cristo Petrolero”

A pesar de ello, Ecopetrol se empeñó en que la gente olvidará las profundas huellas de los impactos ambientales generados durante el establecimiento de la exploración, producción y el refinamiento del crudo, cómo aún se observa en la céntrica Ciénaga Mirar y otros espejos de agua que rodean a la ciudad, que se deterioran rápidamente por las pésimas decisiones ambientales adoptadas por su clase política, muchas de ellas para ocultar y minimizar los desastres de la industria petrolera y las multinacionales que aún saquean nuestra tierra y que mantienen esa deuda con la ciudad.

Construimos sueños, negamos realidades 

Si aceptamos lo que señala el psicólogo norteamericano James Jerome Gibson al abordar de manera crítica la teoría de la percepción y que concluyó que esta no se produce sin “una superficie continua de información básica”, lo que de cierta forma echa por tierra la visión aristotélica de que la razón no es fiable y donde son los sentidos los soportes del conocimiento: “Nada hay en la mente que no haya estado antes en los sentidos”. ¿Pero es posible percibir sin memoria? 

En este sentido debemos reiterar el punto de partida y es que el paisaje no es solo el territorio continente habitado por un sistema de órganos ordenados y dispuestos como un patrón donde todo encaja; ni una simple realidad extendida en continuo movimiento, que revela una función propia y tiene un inevitable ciclo, todo ello edificado por la estructura sociopolítica de la horda, construida bajo la intensidad de nuestra mirada, pulsión que no lleva a ser sujetos implicados que narran sus historias. 

Si entendemos como paisaje algo más que una porción de superficie, es decir, de territorio construido, percibido e imaginado, entonces sería más que volúmenes, luces o entrelazamientos dispuestos y en relación con un entorno, se podría señalar que también es memoria. 

Desde esas perspectivas, lo contemporáneo quizás nos propone la aproximación a nuestra realidad como un sujeto implicado que narra aquello que lo punza excesivamente y de forma dolorosa le proporciona conocimiento o placer, donde la memoria, es decir, esa carga histórica que lleva dentro, le permite reflexionar y hacer lecturas de su presente, no desde la nostalgia contemplativa o la conmiseración judeocristiana occidental, sino de la que nos provoca el aquí y el ahora y es capaz de repensarnos en el futuro. 

De tal manera, que en un recorrido aleatorio por diferentes barrios de Barrancabermeja encontré reiterativamente en las paredes de algunas viviendas, en los jardines interiores o patios elementos artesanales utilizadas para construir algún tipo de escenas que evoca un cierto paisaje idealizado pero que de alguna forma refleja nuestros fantasmas y realidades.

Mientras que desde la Secretaria de Cultura Distrital, a cargo de Alexis Guerrero Sánchez, su alcalde Jonathan Stivel Vásquez Gómez, intentan imponer una visión aséptica, plagiada, de un paisaje vacío: esa noción simplista y efectista del atardecer turístico. Quizás esta pretensión revela el profundo deseo de la clase política: ver a los barraqueños cómo turistas en su ciudad, no como ciudadanos que la interpelan.

En este sentido, las imágenes sintomatológicas revelan paisajes populares impuestos por la moda o tendencia que se extendió hace escasos años en la ciudad, con los que se identificaron los barranqueños; la idea era armar ciertas escenografías, compuestas por muy variados materiales y objetos artesanales e industriales, como las falsificaciones artificiosa de plástico; escenas que nos narran historias y funcionan como objetos escultóricos. 

Así como esos paisajes construidos, algunos mutilados, ensombrecidos, sin tiempo, muy distópicos unos o redundantes otros, como jardines donde conviven flores artificiales y naturales, así es esta cálida ciudad que aún empieza a vivir en medio de sus propias tragedias, hipocresías, pariendo mentiras, pero con ganas de utopías. 

Fotografía: ©ArtistasZona. Barrancabermeja, abril de 2024.

1. Ellos siguen ahí, entre los susurros del alma

2. “To Be or Not to Be”, Mi querida Daniela. 

3. El atardecer es otro.

martes, 16 de abril de 2024

XXIV CONCURSO EXPOSICIÓN DE ARTE MANOLO VALDÉS 2024


El 14 de julio del presente año cierra la convocatoria del XXIV Concurso Exposición de Arte Manolo Valdés en la que pueden participar, con una sola obra en la modalidad de pintura o escultura, artistas de cualquier nacionalidad o lugar de residencia; este certamen cuenta con apoyo del Ayuntamiento de Altura, ubicado en la Provincia de Castellón, Comunidad Valenciana de España. 

Las propuestas en la categoría de pintura deben tener un mínimo de 100x81 centímetros y un máximo de 200 cms. en cualquiera de sus dimensiones, montadas en bastidor o soporte sólido, sin cristal u otros elementos frágiles y su peso no debe sobrepasar los 40 Kg, tanto las obras bidimensionales como las esculturas. 

Premios 

Premio Internacional Manolo Valdés de Escultura: 2.000 Euros y diploma acreditativo. 
Premio Internacional Manolo Valdés de Pintura: 2.000 Euros y diploma acreditativo. 
Premio Artista Joven Manolo Valdés Comunidad Valenciana: 500 Euros y diploma acreditativo (para artistas jóvenes nacidos o residentes en la C.V. con edades comprendidas entre 16 y 25 años). 
Premio comarcal Manolo Valdés de Artes Plásticas: 1.000 Euros y diploma (para artistas nacidos o residentes en el Alto Palancia o el Alto Mijares). 

El fallo del jurado se conocerá 20 días después de la fecha de cierre de la presente convocatoria y las obras premiadas pasarán a ser parte del Fondo de Arte dirigido a la creación del Museo Municipal Manolo Valdés del Ayuntamiento de Altura; así mismo, serán parte de la exposición que estará abierta al público del 13 al 29 de septiembre de 2023 del presente año y estarán dentro del catálogo del evento. Si está interesado realice su inscripción vía on line (Aquí). 

Consulte las bases (Aquí) 

Mayores informes: Ayuntamiento de Altura. Dirección: C/ San Vicente no 2 ALTURA 12410 Castellón, España. Tel.: 964 14 63 84. Correo electrónico: cultura@altura.es. Web: altura.es

viernes, 12 de abril de 2024

EN SEVILLA, CONCURSO INTERNACIONAL DE ESCULTURA URBANA CERÁMICA, “ARIANE”


El próximo 6 de mayo del presente año es la fecha límite para presentación de propuestas al Concurso Internacional de Escultura Urbana Cerámica, “Ariane”, en la que pueden participar creadores de cualquier nacionalidad o lugar de residencia. 

Este certamen tiene un premio de 16.000 € (Dieciséis Mil Euros), cuenta con el patrocinio de AEDAS Homes y el apoyo del Ayuntamiento de Sevilla, España; además, del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), El Centro de Cerámica de Triana, el Estudio de Arquitectura Hombre de Piedra y la Universidad de Sevilla. 

El concurso se pretende combinar elementos contemporáneos como la temática aeroespacial con la tradición cerámica andaluza. Se trata de fomentar el uso de técnicas cerámicas de revestimiento de monumentos escultóricos para conmemorar un evento tan importante como ser capital del espacio europeo. Se busca dejar una huella en el territorio urbano que mezcle arte contemporáneo de la escultura, revestimiento cerámico tradicional y un tema tan novedoso como el espacio. 

Por tal razón, se invita a los/las participantes a presentar obras originales, innovadoras que reflejen un lenguaje artístico personal y que capten la esencia del concurso mezclando tradición e innovación. Se pretende que el resultado sea un monumento escultural revestido de materiales cerámicos y cuya temática nos remita al espacio. La pieza se instalará en la esquina de las calles Francisco Montesinos y Descubrimiento, donde quedará instalado en los próximos años el nuevo centro de la Comisión Europea que albergará la sede permanente del Centro Común de Investigación. 

Las propuestas podrán no tendrá delimitada el tipo de representación artística; por lo que se admiten todo tipo de estilos (realismo, abstracción, figuración, etc.) y se diseñará teniendo en cuenta su ubicación en una zona urbana (esquina de las calles Francisco Montesinos y Descubrimiento). En este sentido, cada pieza debe tener una dimensión mínima de un metro y medio (1,5 metros y medio) y máxima de dos metros y medio (2, 5 metros) en cualquiera de sus tres dimensiones. 

El/la artista presentará un proyecto de diseño y el premio se otorgará a la mejor propuesta, que debe estar finalizada y entregada el día 10 de septiembre de 2024. Los interesados en participar deben presentar una memoria descriptiva (documento en .pdf de máximo 6MB) en el que se describa formalmente la obra y sus materiales, así como su significado y su vinculación conceptual con la temática requerida. También, se requiere la memoria técnica (Un Archivo .pdf de máximo 3 MB) que incluya todos los requerimientos y necesidades técnicas y de medios para la ejecución de la obra y su posterior instalación en la vía pública; el envió de las propuestas escultóricas debe ser on line(Aquí)

Consulte las bases completas (Aquí). 

Mayores informes: AEDAS Homes (No. De Identificación Fiscal o NIT CIF A-87586483): Dirección: Paseo de la Castellana, 130. Planta 5. 28046 Madrid. Tel.: +34 900 26 40 96. Correo electrónico: DPO@aedashomes.com. Web: aedashomes.

martes, 9 de abril de 2024

HANNAH VILLIGER SOBRE EL AQUÍ Y EL AHORA


Con una mirada que se detiene a observar las tensiones de su cuerpo reflejado, sin intervenirlo ni agredirlo, pero tampoco sin poetizarlo, simplemente en una actitud contemplativa de quien intenta indagarse así misma por el aquí y el ahora, la artista helvética Hannah Villiger nos cuestiona sobre qué tan consientes somos sobre nosotros mismos. 

Estas y otras imágenes, así como documentos, son parte de la retrospectiva que le rinde homenaje a una práctica artística que oscila entre la escultura y la fotografía, desde principios de los años setenta hasta mediados de los noventa del siglo pasado; evento que abrió el Centro Pompidou - Museo Nacional de Arte Moderno, con la colaboración de la Fundación Estate Hannah Villiger y bajo la curaduría de Julie Jones, estará abierta en París hasta el próximo 22 de julio del presente año. 

La artista, Licenciada en Escultura por la Escuela de Artes Aplicadas de Lucerna (Suiza) en 1974, rápidamente irrumpió en la escena internacional con sus trabajos inspirados en la tendencia del arte povera y el conceptual, donde presentó objetos sencillos e incorporó diferentes materiales orgánicos.



Por otro lado, con una cámara de réflex de 35 mm produjo distintas series de fotografías en blanco y negro, cuyo protagonistas son elementos naturales en movimiento, como plumas, pájaros y agua, entre otros; mientras que su serie del cuerpo fragmentado, trabajo que denominó “Skulptural”, lo realizó con una cámara Polaroid; instantáneas que son presentadas en gran formato. 

Cabe señalar que la obra de Hannah Villiger revela ciertas influencias de las artistas contemporáneas como Valie Export, Cindy Sherman, Martha Wilson o incluso ORLAN; sin embargo, ella deja a un lado las reivindicaciones feministas o identitarias, muy populares en esos momentos y que están muy presentes a todas las artistas. 

Por esos días, llamaba la atención la grandilocuencia de las publicitadas y destacadas creaciones de las artistas del momento, quienes se batían entre la abyección y la puesta en escena de la muerte del cuerpo como objeto; fue una prolija época donde las creadoras también apelaron a lo extremo como lo hicieron las neovanguardias de la segunda mitad del siglo XX; a la publicidad, las intervenciones sobre su propio cuerpo al estilo de la francesa Mireille Suzanne Francette Porte, más conocida como Orlan, o la argentina Nicola Constantino, con el propósito de presentar las complejidades conceptuales de una posmodernidad que hacía tránsito y era devorada por las tesis que imponía la democracia liberal burguesa a través de sus medios corporativos de información y la reafirmación de valores de la tan anhelada libertad pregonadas por el neoliberalismo, mientras se acomodaba plácidamente en el relativismo moral en su defensa, pero que se constituyó mérito indiscutible del fracaso de la “civilización” de un supuesto mundo basado en reglas promovidas por los países desarrollados del G7 y la ONU

Hecho que quedó abiertamente demostrado frente a sus pretensiones neocoloniales, el suprematismo de la excepcionalidad anglosajona y el eurocentrismo; además, de la innegable participación de estos Estados en el genocidio del pueblo palestino en Gaza.

Sin embargo, Villiger desde la simplicidad desarrolló una obra que reflexionaba sobre lo básico; ese es su incontrovertible valor, él de una artista que se atrevió a exponerse en una época en que se teatralizaba el arte, en medio de un mundo cada vez más circense.

A partir de 1986, Villiger desarrollo su actividad artística en Paris, desde donde participó en numerosas exposiciones internacionales en los años 1990, en el que se destaca la Bienal de São Paulo de 1994; así mismo, sobre su trayectoria su 2001, Kunsthalle Basel montó una retrospectiva. Por otro lado, a principios de 1980, Villiger utilizó la fotografía para producir imágenes a partir de sus esculturas y así recontextualizó a Raising of Dust (1920), de Man Ray y Marcel Duchamp. 

Finalmente, en sus fotografías sobre el cuerpo fragmentado, ella sostiene un espejo mientras realiza sus autorretratos y lo envuelve con un tejido, con esta acción reemplaza la piel y la duplica, y al revestirla adquieren cierta dimensión escultórica.


Fotografía: 

1. Hannah Villiger, Skulptural [Sculptural], 1988/89 
Epreuve C-print (à partir d’un Polaroid), monté sur aluminium, 
125 x 123 cm. 
©Foundation The Estate Of Hannah Villiger. 

2. Hannah Villiger, Skuptural [Sculptural], 1998-1989 
Épreuve chromogène (à partir d’un Polaroid) montée sur aluminium, 
125 x 123 cm Centre Pompidou
Musée National d’art Moderne Achat, 2012 
©Foundation The Estate of Hannah Villiger © Centre Pompidou,Mnam-Cci/Georges Méguerditchian/Dist. Rmn-Gp

3. Hannah Villiger, Skulptural, [Sculptural] 1988-1989
Épreuve chromogène (à partir d’un Polaroid) montée sur aluminium 
125 x 123 cm 
Centre Pompidou, Musée national d’art moderne Achat, 2012 
©Foundation The Estate of Hannah Villiger ©Centre Pompidou,Mnam-Cci/Georges Méguerditchian/Dist. Rmn-Gp

4. Hannah Villiger, Skulptural [Sculptural], 1995/96 
Epreuve C-print (à partir d’un Polaroid), montée sur aluminium, 
125 x 121 cm 
©Foundation The Estate of Hannah Villiger

5. Hannah Villiger, Skulptural [Sculptural], 1995/96 
Epreuve C-print (à partir d’un Polaroid), montée sur aluminium, 
125 x 121 cm 
©Foundation The Estate of Hannah Villiger

viernes, 5 de abril de 2024

EN BARRANCABERMEJA, PUNTO DE VISTA O SOBRE LAS IMÁGENES QUE SE NIEGAN A OBSERVAR LA REALIDAD



Por. Víctor Hugo

La primera Sala de Lectura que tuvo Barrancabermeja fue la "Ana Joaquina Bermúdez de Castellanos", nombre que nació de los Liberales que le hacían fila a quien enseñó cómo mantener la clientela y el poder, Horacio Serpa Uribe; era un homenaje para perpetuar la ideología de derecha de la primera mujer presidenta del Concejo Municipal; este sobrio espacio reemplazó a la olorosa biblioteca de la Escuela Santander. 

Quienes tuvimos la oportunidad de entrar a ella recordaremos con aprecio a la amable señora que atendía y nos alcanzaba viejos y pesados volúmenes de pasta dura; ella tenía que hacer un esfuerzo para bajar de las brillantes estanterías de madera esa pila de hojas animosas que nos hacían cola sin vacilar y nos acercaban a las primeras navegaciones por historias como las de "Dimensión Desconocida", muy diferentes a las que vivíamos diariamente, en una ciudad donde aún se podía caminar y la gente se conocía. 

A pesar de ello, hay que señalar que nuestro mundo no era tan pequeño, porque en la segunda oleada migratoria arribó el Caribe y sus historias de la mano de los obreros petroleros, así como los que bajaron de las montañas de Santander y algunos de los que decidieron no dejarse seducir por un empleo en la "Empresa", como le llamaban a Ecopetrol; pero también estaban los gringos, los chinos, los sirio-libaneses e italianos, y todos ellos nos habían asomado a la ventana desde donde exploramos el mundo sin salir de casa, con sus historias, extraños idiomas y su gastronomía, como el restaurante italiano, La Isla de Capri, lleno de acuarios, donde el mismo José Giuseppe Massa atendía. 

Esta sala era un pequeño, pero cómodo salón, para aquellos que buscaban dónde leer y abstraerse de la intemperancia de lo cotidiano; habitaba una escasa bibliografía, pero no por ello insignificante porque encontrábamos no solo los clásicos de Italo Calvino sino otras visiones como las de Arthur Coleman Danto, quien repetía la pregunta de todos, en una actitud cáusticamente crítica que hacía reverberar nuestra imaginación: ¿Qué es la filosofía? y Después del fin del Arte

Ahí, también leíamos los primeros libros sobre el arte del Renacimiento italiano y observábamos detenidamente las imágenes de las obras de los maestros europeos, así como las coloridas fotografías de lo que se suponía era la promesa de una civilización que nunca se cumplió. De ello no quedó absolutamente nada. 

Un buen día, la peligrosa clase política del puerto petrolero decidió cerrarla y parte de los libros, al parecer, se perdieron en el 2014. Este espacio estuvo clausurado por mucho tiempo, olvidado por la inquisición reunida en el Concejo Municipal y los pasillos de la alcaldía, que decidió maldecir la sala y perseguir a la imaginación, tal como en la actualidad lo hacen, porque muy posiblemente era ese lugar donde la creatividad conspiraba contra el poder. 

Después de hacer un punto del fracasado programa Vive Digital, aquel donde presuntamente Karen Abudinen se robaron 70 mil millones de pesos del internet rural a los niños colombianos con la complicidad de Iván Duque, Cambio Radical y el Clan Char; este hecho, nunca lo investigó la Procuradora Margarita Cabello, al igual que no lo hizo con los 12 billones perdidos por las EPS. 

Hoy en día, se supone que es un Centro de Desarrollo Juvenil, quizás también satanizado, porque solo hay unas cuantas sillas y una escasa mesa, ya que nada es más peligroso que la juventud, como lo demostró durante el estallido social; pero en la pared encontré un ejemplo más de lo que no es un mural, afortunadamente tapado por una pieza publicitaria del CMJ.

Por eso, decidimos aprovechar para realizar una crítica a la estrategia de normalización institucional del arte que se propone desde los espacios del poder a partir de la no mirada (1) que no dice nada, como la de Álvaro Uribe Vélez que siempre lo niega todo, y tu mirada me acaricia los dedos (2) con esos ojos pétreos que se niegan a ver la sospechosa realidad. Esa es nuestra respuesta, con la decidida participación colaborativa de la comunidad afrodescendiente de la ciudad. 

Fotografías: ©ArtistasZona, abril de 2024.

lunes, 1 de abril de 2024

EXPOSICIÓN: COSIMA VON BONIN Y LA ALEGRÍA DEL FRACASO



Por. Víctor Hugo

Sí, retrotrae la memoria con imágenes de la cultura popular y lo instalan en la sospecha que origina la ambigüedad al descontextualizarla, probablemente desafía su presente, porque inmediatamente aparece la incertidumbre ante la posibilidad de la duda por lo que realmente sucedió, así aparece el humor en las 70 obras exhibidas en la Schirn Kunsthalle Frankfurt, de la artista nacida en Kenia pero de nacionalidad alemana, Cosima Von Bonin. 

La exposición “Somos muchos”, curada por Katharina Dohm, estará abierta hasta el próximo 9 de junio en la ciudad alemana de Frankfurt y en ella su creadora no solo expande el humor para permitirnos reflexionar sobre lo preconcebido y normalizado; pero también sobre las reglas sociales que nos impuso el neoliberalismo y su ética laboral y se burla de ello con esa actitud disoluta en la gestualidad de sus piezas muy cercanas al concepto de alienación como lo propone el libro “Para leer al Pato Donald” (1972) de Ariel Dorfman y Armand Mattelart; además con sus estrategias artísticas que van desde la apropiación, la colaboración y la delegación, donde se ién es pregunta: ¿Quién es el autor? 

Por otra parte, Von Bonin nos propone un alto para cuestionar una sociedad en estado de cansancio vegetativo y agotamiento permanente, esclavizada por los horarios y la multiplicidad de trabajos necesarios que solo nos alcanzan para pagar el alquiler y los servicios públicos puntualmente so pena de enfrentar la autoridad y la ley. Esos andamios construidos para sostener el poder y destruir paulatinamente, no solo la privacidad sino la desaparecida clase media profesional, las mismas que se niega a caer definitivamente y prefiere mantener su arribismo social, poniendo de relieve su visión art nouveau de su precaria vida cotidiana. 

La alegría del fracaso 


Quién de nosotros en la cultura occidental no recuerda la enfermiza obstinación del Pato Lucas que refleja la contumacia patológica de una sociedad narcisista y onanista determinada exacerbar al triunfo de los ganadores y a deleitarse con sus sabores, así sean de los otros, desde sus cómodos sillones frente al televisor donde transcurre su noción de actualidad, del aquí y el ahora. Así indefectiblemente el capitalismo nos repiten como un mantra religiosamente intencionado y para que nunca se nos olvide su promesa de que “algún día nos tocará”, ese del “Pronto llegará / El día de mi suerte / Sé que antes de mi muerte / Seguro que mi suerte cambiará”, como dice la canción creada en colaboración entre Héctor Lavoe y Willie Colón, en 1973. 

Sin embargo, a contrapelo de ese anhelante soporífero estado del éxito conquistado y del héroe engalanado con el olivo que hacemos nuestro, está el recurrente fracaso que nos hace reír de un Pato que maximiza hasta la normalidad la mentira, la violencia, y la traición. Es ahí, en estas maniobras de las acostumbradas jugaditas [de uribista consumado] donde aparece la escalera que nos conducirá definitivamente al cielo para alcanzar la victoriosa corona sin dolor alguno ni desprendimiento; así todo es color de rosa, como parece nos impuso a la sociedad la democracia liberal y en la que Freud nuevamente parece tener la razón. 

Este personaje Lucas, que significa “el hombre que es iluminado” representado por un comic oscuro como su envoltura, donde anida su profundo y amargo egoísmo, se juega la vida sin ninguna consideración ética frente a su adversario y utiliza a los demás y a quien no todo le resulta exitoso. 

No obstante, nunca deja de ser una amenaza bélica en búsqueda de su cuarto de hora, de su viralidad, de su reconocimiento, ese que en la actualidad se nos revele como valor social supremo y con ello Cosima pone en cuestión la esencia del capitalismo y uso del marketing para materializar la única realidad concreta: somos simples esclavos, es decir, alcanzamos la ciudadanía cuando expresamos la necesidad de pertenecerle y nos convertimos en sus consumidores, como lo presenta Néstor García Canclini en su libro “Consumidores y ciudadanos: conflictos multiculturales de la globalización” (1995). 

Tal vez, por eso, en la serie “Open Your Shirt Please” (2019), está en extrema tensión, el Pato Lucas lucha contra el inefable negro que lo amenaza con expulsarlo siempre. Al contrario, en las recientes obras textiles como Kalt Modern Teuer, Emporkömmling y Social Climber (2023), el antihéroe manifiesta un nuevo sentido de confianza en sí mismo. Mientras, que en la escultura Church of Daffy (2023), finalmente triunfa y se nos presenta como un profeta con las manos en alto, casi que abriendo su devota alma a lo divino; sin embargo, su embriaguez de gloria lo tiene al borde del abismo y corre peligro de caer. En contraposición a esta escena, en Blame Shifting (2020), un grupo de Bugs Bunny están atrapados en el bote de la basura, este comentario a manera de coda parece ser una inevitable moraleja de la angustiante contemporaneidad que produce el sistema capitalista. 


La Exposición
 



En la primera sala encontramos una instalación de lo que parece un juguete tierno de pollito gigante sobre un misil; además, de esos muñecos fetiches de peluche con esposas que inalterablemente nos habla de nosotros mismos, no solo al exponer nuestra imaginación, sino al materializarla en el otro. Así mismo, aparece un grupo de cerdos rosados yacen tumbados y cansados a la espera de una suerte de la que aún no son consientes (Open Your Shirt Please de 2019)

Por otro lado, encontramos una serie de textiles sobre bastidores, que von Bonin llama “Lappen” (trapos) y que parecen una especie de vallas publicitarias al estilo de los monocromos de Blinky Palermo de finales de los años 1960 o a las pinturas de Sigmar Polke sobre telas baratas. También, la artista usa fragmentos de texto para sus piezas elaboradas a partir de retazos (patchwork), como un juego de palabras contradictorias donde aflora el humor inteligente. 

En este punto parece contradictorio referirse al humor inteligente, aunque es necesario cuando el único significado de lo que se supone chistoso es lo abyecto y la hipérbole como estridente burlar carnavalesca del otro y no al humor que nos hace pensar, como resolutivamente lo sentencia Les Luthiers: “El que piensa pierde”, así leen esta premodernidad de la que algunos se niegan a escapar y que se convirtió, es estrategia de la que la derecha Latinoamérica muy extendida por los medios corporativos de información para mantener el poder y de que nos hemos salido como sociedad. 

Fotografía: ©Schirn Kunsthalle Frankfurt 2024, Photo: Norbert Miguletz y Dan Bradica

martes, 26 de marzo de 2024

¿STREET ART EN BARRANCABERMEJA?


 
Lo que expresa una pared desde el arte no deberían ser únicamente impresiones sensibles aisladas de su contexto, cercanos a la publicidad y el cómic; ni esa recurrente propaganda religiosa evanescente que nos presenta el fanatismo segregacionista del cristiano; tampoco la levedad de una firma que marca el espacio público en busca reconocimiento frente al estigma social o institucional ni el acto inconsútil para decorar una calle; pero así son los gestos plásticos presentes en la recién inaugurada galería de street art (arte urbano), ubicada en la entrada de la Comuna 7 de Barrancabermeja, frente al parque de La Memoria. 

A pesar de ello, el hecho más relevante, la substancia, de este espacio cultural, es precisamente lo que subyace como el fantasma y recorre las calles de la ciudad: sus procesos de construcción social. Esta acción de enunciación revela no solo la apropiación de lo público y cómo desde lo comunitario se resignifican, sino el indiscutible liderazgo de un grupo de jóvenes que intentan desde su perspectiva subvertir la deriva y permitirse a sí mismos repensar su cotidianidad y darles salidas a su propia realidad, lo que por sí mismo se constituye en un poderoso contenido cultural, que desafortunadamente no se hace presente en la pared.



El street art 

La primera pregunta que nos surge es responder a la categórica pregunta: ¿qué es el street art? Esta nos lleva a su propia respuesta. En este sentido, podríamos estacionarnos en el concepto que lo explora como una forma de expresión alterativa, con técnicas y recursos propios que interviene los espacios públicos para no solo sorprender al transeúnte, sino mantener con él un diálogo cómplice y reiterativo.

El arte urbano tiene dos características intrínsecas en su puesta en escena: en primer lugar, se mantiene desde sus inicios el acto creativo como una producción ilegal y efímera, con el propósito de subvertir la supuesta asepsia de una normalidad controlada por la autoridad. En segundo lugar, propiciado desde la institucionalidad, se legaliza como una resolución que responde a la toma de la pared que interpela al poder y activa, de cierta forma, el valor de la crítica política y social al exponer sus discursos desde la capacidad de la representación. Estos discursos mantienen el coma cerebral de la sociedad sumergida en la extensa propaganda que le da soporte, posibilitando la gobernanza y que se difunde a través de los medios privados de información.

Por otro lado, y para ponernos en contexto, algunos historiadores del arte señalan que este aparece en los albores mismos de la civilización e indican cómo desde la antigüedad ya hay vestigios de sus antecedentes, como en la ciudad de Pompeya en el año 79 a.C.

 En el siglo XX se mencionan a artistas como Jean-Michel Basquiat, entre otros, quienes usaban los espacios públicos para exponerse. Pero es a finales de la década de los años 90 que se acuñó el concepto de post-grafiti para agrupar diferentes expresiones que aparecieron en las ciudades europeas y en el imperio del norte. Aunque fue posterior a la irrupción del movimiento contracultural que gestaron los jóvenes en París en la primavera de 1968, bajo la consigna: "La Imaginación al poder" o "Seamos realistas pidamos lo imposible".

Este mismo fenómeno también se hizo presente en Norteamérica cuando los jóvenes comenzaron a organizar sus protestas contra la guerra de Vietnam y se configuraron las primeras comunas hippies y los movimientos sociales contra la segregación racial, como The Black Panther.

En este sentido, hay quienes proponen que la génesis del arte urbano se dio como evolución del movimiento Bombing de Filadelfia, con el que los artistas bombardearon las blancas y ofensivas paredes que mostraban una aparente normalidad y limpieza, no solo formal sino también en la conciencia de la sociedad, y que luego fue apropiado por los jóvenes del Bronx en Nueva York, quienes firmaban los vagones del metro para marcar territorio contra la exclusión social, de la que aún siguen siendo víctimas, y donde finalmente aparecieron las imágenes

El strret art barranqueño



 
Como ya lo apuntábamos, al parecer en la ciudad hay un entusiasta grupo de creadores en pleno proceso que se expresan en las paredes de la ciudad y quienes tienen una misma técnica, una paleta de colores muy uniforme y apelan al efectismo de temas e iconos recurrentes; no obstante, muestran cierta destreza formal aunque con algunas dificultades en el dibujo

Por otro lado, la galería de arte urbano inaugurada el pasado domingo 24 de marzo, ubicada en las inmediaciones del parque de La Memoria, representa un hecho nada menor, porque fue precisamente en este sector donde se presentó la masacre del 16 de mayo de 1998, uno de los sucesos que marcó la ciudad y dejó 32 personas asesinadas por el narcoparamilitarismo

Sin embargo, intencionalmente o no, estos artistas le dieron la espalda a la historia reciente de la ciudad y el desgarrador suceso no les dijo nada; esta declaración se materializa en lo que expresaron los creadores y para algunos se constituye en un gesto de desideologización del espacio mismo, de desmemoria, como lo diría Eduardo Galeano; al mismo tiempo, este desafortunado olvido podría estar al mismo nivel de la estrategia empleada por la derecha colombiana, que es secundada por los medios de información, quienes reiteradamente se han opuesto a los resultados de la Comisión de la Verdad y de la Justicia Especial para la Paz, JEP.

De otro lado, vemos los íconos repetitivos de siempre: iguanas, jaguares, mariposas, garzas, junto a declaraciones de carácter religioso, algo de cómic y una muy lejana representación de lo indígena, que además está muy de moda, en todo el arte. Todo esto denota hasta dónde ha llegado la investigación que hacen los artistas de Barrancabermeja, quienes se quedaron en esa noción romántica del arte como inspiración o de la pintura automática del dadaísmo; mientras que hoy todos los hechos artísticos están soportados en la investigación, porque lo que nace de llana espontaneidad no es arte.

También, vemos algunas firmas sobre el espacio; este gesto se usó a finales de los años 80 y 90 en Nueva York y se impuso en todo Occidente, quizás por el momento histórico dominado por la globalización (estrategia de homogeneización y cristalización de la conciencia social), que en cierta medida dio sus frutos porque las relaciones sociales que hoy planteamos son un reflejo de ello; todo esto impuesto desde los Estados Unidos por los Bush y Reagan, y de la espeluznante líder conservadora Margaret Thatcher; pero hoy esas letras góticas ya no funcionan ni nos dicen nada.

En este punto, también hay que advertir que tampoco se trata de usar la pared para hacer consignas, sino de preguntarnos cómo vamos a intervenir y de qué nuevos sentidos vamos a dotar al espacio público. Porque si la idea de la Administración Distrital es promover verdaderas propuestas de arte callejero que se conviertan en referente e impulsen el turismo cultural, como lo propone el Gobierno Nacional, estamos muy lejos de lograrlo. Tal como lo ha hecho Bogotá y el mismo Londres, donde se ofrece un recorrido por toda la capital inglesa para observar la obra fundamental de Bansky.

La gestión 

(De izq. a Der). Secretario Distrital de Cultura Alexis Guerrero Sánchez: Alcalde Distrital, Jonathan Stivel Vásquez Gómez y el artistas Juan Carlos Ardila Beleño. 

En este punto, es importante problematizar: ¿Cuál es el concepto de cultura que define el quehacer de los artistas de Barrancabermeja? ¿Cómo se llevan a cabo los procesos de gestión y cuáles son sus alcances? ¿Cómo se realizan las convocatorias y bajo qué determinantes? ¿En qué medida interviene la curaduría?

Preguntas que esperan sus respuestas y a las que necesariamente deben ser planteadas en la discusión permanente sobre lo que está haciendo el movimiento artístico, los alcances de los procesos y el quehacer de los trabajadores de la cultura de la ciudad; eso sí, muy aparte de los cuestionados mecanismos de tercerización de la contratación pública y con los que parte de los recursos destinados terminan en manos de quienes ni siquiera son de la ciudad, como lo hace el Centro Cultural del Oriente, y con los que se pagan presuntamente favores políticos, se cumple con la clientela y se deja entrever el poder del fantasmagórico del operador.

Ahora bien, en momentos en que se define la ruta para los próximos cuatro años del Distrito de Barrancabermeja, también sería importante conocer o definir si los creadores han intervenido en el Plan de Desarrollo, tal como lo contempla la Ley 152 del 15 de julio de 1994 y sus posteriores avances, porque no solo se trata de convocar a los creadores y gestores para escucharlos, sino cuánto de sus proyectos se materializarán y cuál va a ser la definición de su quehacer. Sería interesante. Así como cuál va a ser la política de artes plásticas y visuales de Barrancabermeja.

Las fotografías 

Ante lo que defino como gestos plásticos, mi mirada sobre ellos y estas realidades a las que me refiero, me propuse abordar la construcción de imágenes con cierto humor (las primeras tres) y como una indagación de lo lúdico, con el fin de posibilitar otras lecturas y observar el uso social que hacen los transeúntes de las propuestas plásticas, porque no se trata de salir a pasear sino de indagar sobre nuestra realidad.
 
En este orden de ideas, la intención no es presentar conceptos concluyentes, sino de abrir la posibilidad de la discusión, si se quiere con quienes así se lo permitan, no de la incapacidad reduccionista de definir sus inamovibles categóricos de lo irrefutable, sino desde la concepción del arte.  En este orden de ideas, la intención no es presentar conceptos concluyentes, sino abrir la posibilidad de la discusión, si se quiere, con quienes así lo permitan, no de la incapacidad reduccionista de definir sus inamovibles categóricos de lo irrefutable, sino desde la concepción del arte.

Esa misma concepción que se propone multiplicar el sentido de los objetos que cotidianamente nos rodean y donde interviene la mirada del artista para dotarlos de nuevos valores significativos al atreverse a exponerlos por fuera de su contexto habitual; así como las prácticas y los hechos producidos por las comunidades.
 
Desde esta perspectiva se trata de abordar la creación de objetos por fuera de su singular rutina, de permitir percibirlos desprovistos de ella y así crear nuevas piezas con esa polifonía de voces, tal como nos lo propone Jacques Lacan quien indicó que un objeto es elevado a la categoría de arte no por lo que yo observo sino por el diálogo que establece con mis sentidos[s].

Fotografias: ©ArtistasZona, marzo de 2024.