viernes, 30 de enero de 2009

41 SALÓN NACIONAL DE ARTISTAS, NUEVA CURADURÍA EN CALI


Artistas Antioqueños Frente al Salón Nacional

Como artistas de la Curaduría Confluencias. Arte-Ciudad, tuvimos la oportunidad de participar en el 41 Salón Nacional de Artistas en Cali, ante el cual nos permitimos expresar distintas opiniones, coincidiendo en muchas de nuestras apreciaciones individuales sobre ésta experiencia:

Una mirada general

El Salón Nacional de Artistas ha fundamentado a lo largo de varias décadas la posibilidad de dar cuenta de los procesos artísticos a nivel nacional, como parte de las políticas culturales del Estado. En sus últimas versiones ha sido necesario cuestionar los problemas que como institución ha enfrentado a través de su historia, por lo que la reinterpretación general que aporta ¡Urgente! en esta nueva versión del 2008, se hace en un primer momento interesante al posibilitar la apertura de nuevos horizontes que potencien este espacio, permitiendo la entrada de artistas, proyectos y procesos internacionales que enriquezcan los procesos desarrollados a nivel nacional, así como la difusión y promoción de los artistas locales que pueden ser vistos por curadores y artistas de otras esferas.

Pero, más allá de reconocer que la intencionalidad de la Nueva Curaduría está bien fundamentada, si a las Curadurías Regionales no se les da el mismo nivel y respeto, como sucedió en Cali, y si las condiciones de espacio, producción, promoción, recursos y montaje son totalmente diferentes para los unos y los otros, difícilmente se pueden realizar proyectos y presentar exposiciones que den cuenta a cabalidad del trabajo realizado en los Salones Regionales. Por ello, sin desconocer la trayectoria de los artistas nacionales e internacionales participantes en la Nueva Curaduría, no logramos, sin embargo, entender lo que pasó con las curadurías regionales, que quedaron totalmente minimizadas.

La estructura general del 41 Salón Nacional de Artistas en Cali presentó un carácter centralista, donde hubo un total y evidente desequilibrio entre el manejo y la disposición que se le dio a los Salones Regionales con respecto a la “Nueva Exposición” realizada por el Comité Curatorial de ¡Urgente!, que más que generar un diálogo horizontal entre la producción artística regional, nacional e internacional, presentó un “Gran Evento de Carácter Internacional” que excluía los diversos procesos de los Salones Regionales de Artistas iniciados durante el 2007. Podría pensarse que esta exclusión sería obvia, ya que difícilmente los Salones Regionales estarían a la “altura” de lo “mejor del arte contemporáneo” y “el arte más provocativo a nivel internacional”, como el texto curatorial de ¡Urgente! lo sugiere, llevándonos a preguntar: ¿Era el Salón Nacional el espacio indicado para excluir los Salones Regionales, base misma del evento que contaba con procesos investigativos iniciados por los menos 2 años antes?

Sólo observando el material impreso que produjo el Salón (las postales de invitación, el periódico ¡Urgente!, la Guía general, etc.), se hace evidente la invisibilización que sufrieron los Regionales, donde tan sólo los artistas de la Nueva Curaduría tuvieron la posibilidad de ser nombrados, mientras que, a manera de apéndice, se hizo referencia al título de cada Salón Regional y a su curador. Si a esto se suma la precariedad de los espacios asignados, la limitación presupuestal, el tardío inicio del montaje, la carencia de requerimientos mínimos para realizar un montaje sencillo (cintas doble faz, clavos, etc.), la situación se agrava, contrastando de forma radical con la Nueva Exposición que comenzó su producción y montaje por lo menos una semana antes, que contó con múltiples asistentes y disponibilidad de equipos; sin dejar de lado las bolsas de trabajo para los artistas invitados, la realización de algunas residencias artísticas y los generosos viáticos con que estos artistas contaron.

El caso concreto de la Curaduría Confluencias. Arte –Ciudad en ¡Urgente! Tanto la curaduría del Regional de Antioquia como los artistas hicieron un trabajo serio e intentaron presentar sus proyectos de la manera más apropiada, teniendo en cuenta el carácter del Salón Nacional de Artistas. En este sentido, a pesar de observar los primeros inconvenientes decidimos continuar, tratando de adaptarnos a las difíciles circunstancias, pero estas finalmente desbordaron las posibilidades de resolverlas:

El espacio asignado -el Museo de Arte Religioso-, no era un espacio adecuado para instalar las obras de 33 artistas, que finalmente se presentaron “hacinadas” (extraño señalar esto después de observar la infraestructura con la que contó el evento central, es decir, la Nueva Curaduría). Además el Museo en su condición de patrimonio histórico, no facilitaba el proceso de montaje (por los cuidados que había que tener con sus muros, techos y espacio en general que complicaba muchísimo el montaje de una muestra de arte contemporáneo), más aún cuando el tiempo que asignó la organización fue tan sólo de dos días para terminar de adecuar el espacio y realizar el trabajo museográfico.

La inmensa confusión en la producción, la logística y las comunicaciones del evento se reflejaron en los problemas que no se subsanaron para la apertura, en particular con equipos y plotters de presentación de cada sala -que aún no sabemos si se pusieron o no-. La ausencia de la persona encargada de la producción general del Salón Nacional, durante prácticamente todo el montaje de la Curaduría Confluencias. Arte-Ciudad, fue incomprensible, dado que su presencia en muchos momentos se hizo fundamental con miras a solucionar las dificultades que se presentaron. No obstante todas estas dificultades, resaltamos la labor de personas competentes y comprometidas como: Joao, Jonathan, Andrés, Daniela, Alexander y Giovanni, quienes con muy buena voluntad trataron de ayudarnos en todo lo que pudieron aunque los recursos y la cadena de las comunicaciones en todo el Salón Nacional fue muy complicada, y por lo tanto, llenar los huecos dejados por otras personas fue casi imposible. Asimismo, por la complejidad de todo el Salón, este equipo tenía que itinerar por muchas sedes.

Desde nuestra experiencia percibimos un escaso, por no decir nulo apoyo logístico para las intervenciones en espacio público, quedándonos sin saber si los encargados de coordinar esto en Cali informaron a las autoridades locales para la necesaria colaboración y seguridad de los artistas y de sus intervenciones, duda particularmente generada por lo ocurrido con la artista Laura Barrientos, quien tenía los permisos respectivos para la realización de su obra “Trapitos al sol” que fue tirada al Río Cali por la fuerza pública.

Por otro lado, el presupuesto al parecer no fue equitativamente invertido entre todas las curadurías y sus respectivos montajes, por lo cual sería muy importante, en aras de la transparencia, saber cómo se manejaron los recursos del evento que, creemos, evidenciaría el trasfondo real de todos los intereses que estuvieron en juego y a su vez demostraría la desorganización de este evento al cual se le quiso dar una gran envergadura internacional.

Los artistas participantes en la Curaduría Confluencias. Arte-Ciudad fuimos seleccionados con el riguroso criterio de la artista y curadora Gloria Posada, que obedeció a los lineamientos trazados en su investigación realizada desde años anteriores sobre las relaciones Arte-Ciudad. Consideramos que el Regional de Antioquia hizo una convocatoria amplia que incluyó artistas emergentes con obras y proyectos de factible realización, invitó artistas de trayectoria que han trabajado lo urbano desde hace 30 años, y asimismo, participaron universidades con curadurías autónomas, y todo se hizo con un sentido de respeto, equidad y diálogo, sin concesiones facilistas, generando un cruce y una confrontación real entre los artistas.

Respecto al debate generado sobre el Salón Nacional, nos unimos a lo dicho por Rafael Ortiz y preguntamos: ¿Fue acaso el 41 Salón Nacional de Artistas o la Primera Bienal de Cali? porque es aquí donde se evidencia el trasfondo político que tiene el evento, con miras a posicionar a Cali en el panorama internacional, interés válido para la ciudad, pero ¿de qué forma? El error de la Organización se manifiesta precisamente en la cuestión nominal, ya que no entendemos por qué continuó designándose como Salón Nacional de Artistas, si en realidad el único interés de su Comité Curatorial era el de promocionar de forma ambiciosa la Nueva Exposición, sin importar lo que sucediera con los Salones Regionales, que como ya lo hemos planteado era su base misma. Surgen nuevamente preguntas como ¿Tan sólo se conservó la denominación “Salón Nacional de Artistas” para acceder a unos dineros oficiales y a una plataforma institucional que permitiera difundir y gestionar el nuevo evento?

Creemos también que tanto los curadores como los artistas que participamos de los Salones Regionales cometimos un error: haber hecho parte de esa falacia denominada 41 Salón Nacional de Artistas, y validar su realización. Tal vez, nos dimos cuenta tarde porque ya nos encontrábamos en Cali y todo se nos presentó sobre la marcha, sin tiempo para detenernos a pensar y tomar otra decisión. No olvidemos también que a esa altura ya los curadores habían firmado contrato y de no haber participado estarían, con seguridad, enfrentando un problema legal.

En resumen, el 41 Salón Nacional de Artistas fue sumamente excluyente por parte de sus organizadores y directivos, donde vemos que este híbrido, Salón Nacional con invitados extranjeros, quedó sin digerir, se convirtió en un experimento fallido. Aunque es importante, como ya los hemos dicho, el diálogo con los artistas invitados, nacionales e internacionales, siempre y cuando exista una real confrontación e interlocución en igualdad de condiciones, que sea enriquecedora del proceso artístico tanto para Cali como para el resto del país, como estaba propuesto en las mesas redondas con los invitados, convocadas en el programa para el 20 y 21 de noviembre (“Mesas redondas con artistas invitados. Mayor información en http://www.urgentecali.org”), evento que nunca se realizó y que fue re-programado cuando los artistas y curadores ya habían viajado a sus respectivas ciudades. Finalmente, mesas redondas de las cuales se sigue excluyendo a los artistas y curadores de los Salones Regionales ¿O acaso se ha programado alguna mesa redonda con ellos?

Firman: Fernando Arroyave, Nadir Figueroa, Patricia Londoño, Albany Henao, John Mario Ortiz, Jonathan Carvajal, Luz María Piedrahita, Laura Barrientos, Mauricio Carmona, Lina Duque, Andrés Vélez, Sergio Giraldo.

Fotografías: ©Hugsh, 2009. 41 Salón Nacional de Artistas, Urgente Cali. Aspecto montaje Salón Regional, Zona Oriente, Curaduría Región Imaginada del Equipo Curatorial Coordillera.

Tomado de esferapublica: http://esferapublica.org/nfblog/?p=1508

jueves, 29 de enero de 2009

Un intento más


Plan Decenal de Cultura de Santander
Por Victor Hugo

El pasado sábado 24 de enero fuimos convocados los artistas plásticos visuales de Bucaramanga, por el exconcejal, narrador y gestor cultural Francisco Centeno, con la intención de abordar el Plan Decenal de Cultural para Santander.

Este es un intento más después que la Ley 397 del 7 de agosto de 1997 o General de Cultura, determinará que los entes territoriales y departamentales elaboraran una ruta planificada del escenario cultural en una prospectiva de 10 años.

Sin embargo, en Santander, las diferentes administraciones departamentales y municipales hicieran caso omiso a la normatividad. De tal manera, que faltando apenas un año de lo que se debió hacer desde el 2000, aún intentamos abordar el tema sin la rigurosidad que requiere el sector como eje fundamental para el desarrollo regional. Así tuvimos la oportunidad de expresarlo a los escasos 23 asistentes a la reunión, en la que su organizador nos propuso una antimetodológica lluvia de ideas, después de escucharlo por una hora y media, en una disertación que poco le aportó de manera contundente y definitiva al propósito del ejercicio.

Metodología

Al hablar de planificación necesariamente hay que hacer una lectura de la territorialidad, conocerla a partir de la información contextual que nos permita explorar una realidad a partir de los indicadores de gestión, presentar una pormenorizada interpretación de los datos disponibles que modelan lo territorial, señalar de forma puntual los antecedentes que develen los soportes conceptuales, jurídicos y las cifras de los diferentes sectores económicos, así como las proyecciones que hace las administración pública a la hora de proponer renglones de inversión y sus posibilidades reales en términos presupuestales.

Igualmente, cruzar todo tipo de variables en los diferentes escenarios del desarrollo que afectan y se constituyen en puntos de partida para crear procesos desde los cuales se pueda pensar un plan. Además, realizar una lectura de lo político frente a las posibilidades concretas de crear políticas y no simples coyunturas para el proselitismo ni el acomodamiento del poder, ni mucho menos para encauzar una inversión que sea avalada desde un supuesto ejercicio de participación, que se refrenda con las firmas de quienes participan en los eventos, pero a los que nunca se le tienen en cuenta sus opiniones a la hora de diseñar los planes y presentar a las instancias legislativas las iniciativas, las que finalmente se elaboran desde los escritorios de los asesores y consultores.

Por eso, hablar de un ejercicio de planificación va mucho más allá de una simple reunión y un foro-espectáculo, para la prensa y el protocolo oficial con el que se cumple un contrato, cuando se presenta el documento del informe acompañado de las múltiples fotografías que sólo alcanzan a deslumbrar a la Administración Pública.

Desde esta perspectiva, todo hizo falta en la cita que nos dimos el pasado sábado 24 de enero. Ni siquiera fueron claras las intenciones y aún no conocemos una lectura real desde donde la administración departamental piensa el departamento, por ejemplo: ¿Qué escenarios de desarrollo proponen? ¿A partir de que insumos diseña sus prospectivas, que lecturas geoestratégicas tiene de la territorialidad y que consideraciones políticas median en su visión de futuro? Nada, de eso no sé escuchó nada, pero al contrario en nueve (9) ocasiones el Consultor Francisco Centeno nos hizo referencia a que le habían faltado 21 votos para ocupar una curul en el Concejo Municipal de Bucaramanga y que se hiciera realidad el pacto político que tenía con el músico John Claros, quien debería estar ocupando la Dirección General del Instituto Municipal de Cultura y Turismo. Creo que ha escuchar reproche no fuimos. Eso fue exactamente lo que manifesté.

Vaya ejercicio de planificación del sector cultural de Santander. Quizás, como este es un año eminentemente electoral, se esté preparando la próxima adhesión a la campaña al Senado y la Cámara, que tal vez le asegure a Francisco Centeno su próxima curul en el Concejo. Nada malo, le sacaría un buen dividendo político al hecho de convocar a los artistas santandereanos a pensar los escenarios de lo cultural en el departamento.

De tal manera, que ante estas realidades, sugerí la intervención de la Oficina Asesora de Planeación Departamental para que nos presentará su idea de departamento, que se encuentra consignado en su Plan de Desarrollo: Santander Incluyente; además, que realizará un taller sobre la metodología que contempla la elaboración de un plan, con el propósito que esta herramienta nos permita hablar un lenguaje común a partir de los criterios que el Departamento Nacional de Planeación y el mismo Ministerio de Cultura tiene al respecto.

A esta altura de la reunión, uno de los integrantes del Grupo Pie Izquierdo, tratando de exculpar al organizador, manifestó que éramos "simples artistas" y que deberíamos proceder a la lluvia de ideas que se nos proponían en la Mesa de Trabajo.

Frente a este punto de vista, realmente no sé si unos artistas pueden ser simples o no; tal vez esa apreciación se refería a la condición socioeconómica dado por la última jornada de sisbenización.

Quizás, el arte no tenga nada de complejo y su constructo conceptual sea un vacio e insípido recorrido por la historia de la civilización que arroje como conclusión que nunca ha llegado a ninguna parte, que ni siquiera ha alcanzado a aportar nada sustancialmente significativo a la humanidad. Quizás.

Pero lo cierto y frente a semejante profanación, liviandad, desconocimiento de la historia del arte, en medio de un gesto incondicional de apoyo a la labor emprendida por Francisco Centeno, contratado por la Oficina de la Asesora de Planeación Departamental, Consuelo Ordoñez, y en medio de una jugada de ajedrecista, que suele presentarse frente al disenso, no quedaba otra cosa por decir que: -Las cosas hay que hacerlas bien, esa es la responsabilidad social, máxime si se trata de artistas que sólo proponen ejercicios creativos y provocadores de reflexiones frente a la sociedad.

Mesa de Arte Plásticas: ideas preliminares

Ya entrando en materia respecto al sector propuse: el fortalecimiento del programa de Bellas Artes de la UIS, con el propósito de crear una escuela de carácter presencial, con profesores de planta que construyan nuevos diálogos y procesos de investigación. Así mismo, como la construcción de Sala de Exposición en cada una de las seis (6) Provincias del departamento; también, la revisión de los programas educativos de las escuelas y colegios del departamento en lo que corresponde a la cátedra de educación artística, con el objetivo de posibilitar su encuentro con los planes de los entes territoriales y realizar verdaderas sinergías entre los sectores de educación y la cultura, que propicien nuevos escenarios para el desarrollo y la formación de públicos.

De otro lado, se creó un consenso de crear la Escuela Departamental de Artes. Al tiempo, que promover la profesionalización de los creadores santandereanos a partir de programas que puede abrir la UIS, para aprovechar su capacidad instalada y la infraestructura de la Universidad.

Preocupaciones

Que va a pasar con el Plan o esa incandescente lluvia de ideas que propusimos que aún no tiene un sentido orgánico que nos permita conocer: ¿Qué es lo que propone? ¿Para dónde van las intenciones de sus consultores?

¿Quién va a realizar el seguimiento en el trámite de elaboración del documento y su posterior presentación a la Asamblea Departamental con el fin de que se constituya en una política por Ordenanza? ¿Quién nos garantiza realmente que este no sea un esfuerzo más? Amanecerá y veremos, esperemos que sí.

Para finalizar, a pesar de mi posición crítica, habrá que darle un margen de espera y depositar la confianza en quienes están frente al Plan. Además, de hacerle seguimiento y rodear esta propuesta para sacarla adelante.

¿Acaso no es a la Secretaria de Desarrollo Departamental, la que le corresponde dentro de sus objetivos misionales el tema cultural? ¿Cuál es su participación? Extraño que no haya estado presente.

Fotografía: Aspectos de la reunión e intervención de Francisco Centeno. 24 de enero de 2009. Casa de la Cultural Custodio García Rovira. Bucaramanga

viernes, 16 de enero de 2009

Últimas noticias


Israel, Terrorismo de Estado

jueves, 15 de enero de 2009

EN CALI, LA CUESTIÓN DE LA IMAGEN: 41 SALÓN “NACIONAL” DE ARTISTAS

Entre el melodrama y la memoria
Por. Victor Hugo
“La memoria es un proceso abierto de reinterpretación del pasado, que deshace y rehace sus nudos para que se ensayen de nuevo sucesos y comprensiones. Es la laboriosidad de una memoria insatisfecha la que no se da nunca por vencida, la que perturba la voluntad de sepultar oficialmente el recuerdo como depósito fijo de significaciones inactivas: una memoria tironeada entre la petrificación nostálgica del ayer en la repetición de lo mismo y la coreografía publicitaria de lo nuevo que se agota en las variaciones fútiles de la serie-mercado”. Nelly Richard
La obra “Compasión histérica” [1] nos muestra una serie de rostros en primer plano de actrices reconocidas de melodramas (Telenovelas), con un apasionado entusiasmo por la fervorosa histeria o la impostura ficticia que arde en el anhelo por pretender una demostración de su codicia histriónica, como seguramente se lo demanda el libreto y la caracterización que el personaje hace en ese momento preciso de la escena.

Por su parte, “Retrato Colectivo Presidentes”, también nos acerca a los rostros en primer plano de quienes han sido los últimos huéspedes de la Casa de Nariño y caníbales del poder en nuestro país, quienes nunca posaron colectivamente para su retrato, porque mantienen un enconado odio y las más irreconciliables disputas ideológicas, aunque siempre sirvieron y servirán a los mismos intereses, no importa que se llamen: Gaviria, Samper, Pastrana o Uribe.

Melodrama y política

Estas obras, también, nos recuerdan un capítulo más de la novela política nacional: el Proceso 8000, que sólo dejó algunas canciones que le hiciera el compositor Jairo Valera a los señores del narcotráfico; además, de dudas y un manto de impunidad que encubrió a sus verdaderos responsables.

Mientras los único que conocen la verdad, los Rodríguez Orejuela, guardan silencio porque al parecer negociaron sus condenas en las Cortes norteamericanas con la información de los políticos colombianos involucrados con el Cartel de Cali.

En este melodrama uno de sus protagonistas fue Fernando Botero Zea, hoy refugiado en el Distrito Federal de Ciudad de México y prófugo de la justicia colombiana por ser, según él, perseguido político. Al tiempo, que su padre, el Maestro Fernando Botero, esta empeñado que el país olvide, mientras realiza uno de sus mejores negocios: las donaciones.

Por un lado, hace un ejercicio de asepsia sobre el apellido de su grupo familiar y, por otro, recibe por partida doble jugosas ganancias económicas, con las exenciones de impuestos por sus donaciones y vuelve a ser titular de primera plana en la prensa especializada.

Todos estos hechos, que parecen los típicos de una campaña de marketing, sin duda volverán a cotizar su obra en los mercados internacionales, a raíz del más afanado acto de “altruismo” artístico que en los últimos años haya protagonizado artista alguno en nuestro país. Buen negocio.

Así tal vez logremos olvidar y ser indulgentes con los actos de su hijo, Fernando Botero Zea, hoy prófugo, y con la lavandería de dólares que instalaron en la Campaña de Samper Presidente, durante 1994.

Colombia olvidará pronto la cajas forradas en papel regalo repletas de millones de pesos que entregaban en la Campaña, para comprar votos y aceitar la maquinaria electoral del Partido Liberal, con los dineros del Cartel de Cali; por esos días el compositor caleño Jairo Valera y su Grupo Niche cantaban al país de las fiestas, el olvido y la doble moral; al tiempo que escuchábamos la defensa del entonces Ministro del Interior Horacio Serpa Uribe ante la amenaza de destitución cargo del Presidente y su exaltado show retórico, que terminó con la cómplice absolución de Ernesto Samper Pizano por parte del Congreso de la República, cuando la evidencia era contundente.

Histerias en primer plano

Son dos obras diferentes, que se encontraban una al lado de la otra, planteándose sus propio dialogo y esquivándose la mirada. Al tiempo, el público se preguntaba que tenía que ver una actriz con los presidentes.

Tal vez no falto la señora que pensó, que la obra desenmascaraba un idilio amoroso entre alguno de estos personajes públicos o que seguramente nos mostraba una historia idílica no contada al país ni registrada por la sección ligth de algún noticiero o revistas de farándula. Quizás, una de esas damas evocaba algún capítulo de la telenovela que vio la noche anterior.

No obstante alguien pudo asomarse a la reciente y desastrosa historia en la que nos encontramos sumergidos, en medio de las trampas del poder, la más absoluta impunidad y el encubrimiento de los medios de información.

Eso sería mucho pedir, pero es posible que hayan aflorado de la memoria la provocación a la que nos expusieron las dos obras; mientras, que para algunos todo sigue igual y nada pasa en el país de la Seguridad Democrática, mientras los medios trasmiten la guerra y cuentan diariamente palestinos asesinados, el presidente Álvaro Uribe Vélez recibe en Washington, de las manos de Bush, su condecoración a la obediencia infame y al encubrimiento homicida.

A la vez, la iglesia colombiana sigue el juego cómplice, porque sobre ella también recae la responsabilidad histórica de la violencia, pero sigue empeñada en esconderlo elaborando discursos sobre la paz y reparte bendiciones a los dueños del país, los mismos que siempre han negado la subsistencia digna de los trabajadores colombianos y los esclavizan con salarios de hambre.

Pero no importa, que todo siga igual y más bien cállese antes que vengan por usted y se configure otra ejecución extrajudicial (falso positivo), porque aquí se premian las canciones de Jairo Varela como antídoto contra el dolor de la muerte que promueven el consumo ligero; además, de las masacres, los asesinatos selectivos, las andanzas políticas con los narcoparamilitares, bajo el abrazo encubridor del Estado paisa, obstinado indefinidamente a la pirámide que en la actualidad se encuentra en el poder. ¡Qué vergüenza!

41 Salón Nacional de Artistas: Carolina Zuluaga. Obra: Compasión histérica(Izquierda). Video instalación, 2007 (Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali). Intervención: Victor Hugo Pablo Tamayo. Obra: Retrato Colectivo Presidentes (Derecha). Video instalación, 2007 (Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali).

Fotografía: ©Hugsh, 2009. En primer plano.

Nota

[1] La obra “Composición histérica” hacen parte de la investigación curatorial de la zona centro, realizada por los curadores Claudia Salamanca y Andrés Gaitán: “El espejo ni sí ni no sino todo lo contrario” y se encuentra dentro del eje de la “Imagen En Cuestión” del 41 Salón “Nacional” de Artista, Urgente Cali.

miércoles, 14 de enero de 2009

Exposición: Metáforas


ObjetolibroObjeto
Por. Miguel Ángel Gelvez, Artista Plástico

Lo que más nos falta es creer en el mundo. Perdemos el mundo y nos ha sido tomado. Creer en el mundo es también suscitar contecimientos, producir nuevos sentidos y subjetividades-aún pequeños-que escapen el control o hacer nuevos espacios tiempos, aunque sean de superficie y volumen reducidos…
Gilles Deleuze

Empiezo este texto agradeciendo la invitación que me hiciera al proyecto “METAFORAS” libro objeto, el maestro Cesar Chaparro.

El que suceda hoy preguntas sobre el libro y su lenguaje en nuestra ciudad obedece como lo diría el maestro Walter Gómez a un estado de “incomodidad de la silla”. No es gratuito que desde la facultad de diseño grafico de la UDI se aborden y desborden las estructuras espacio, tiempo y se propicien lecturas y maneras de leer el libro; tampoco lo es la participación de los artistas plásticos en esos interrogantes. hay que decir jugo un papel importante el intercambio binacional que se ha venido realizando con nuestros hermanos venezolanos, la propuesta curatorial del libro de artista propuesta por Venezuela para el salón regional propicio libros de artista en la región que participan en el Salón Nacional de artistas en la ciudad de Cali.

Esta muestra colectiva es fundamental en los tiempos del individualismo porque nos habla de integralidad, de intencionalidad, de mirada y construcción colectiva como ejercicio que retroalimenta el mundo visual, poético y tangible, desde las acciones y sentidos, así sean pequeños, que nos encuentran y generan diálogos semánticos, semióticos y plásticos esta vez desde lo complejo o simple que puede ser el libro y su anatomía.

¿Que contiene al libro, cómo se lee el libro, que dice el libro, etc.? Pueden ser algunas preguntas que surgen de esta invitación metafórica empeñada en la necesidad de resignificar la estructura y contenido del libro como hecho plástico y lenguaje cotidiano en estos tiempos de caos y analfabetismo visual.

Según Ulises Carrión en su texto: “El nuevo arte de hacer libros”, cada libro del nuevo arte busca este libro de absoluta blanqueza, de la misma manera que cada poema busca el silencio… Además, el artista enfatiza que para los autores del nuevo arte el lenguaje es un enigma, un problema; el libro alude a las maneras de solventarlo (1).

Con respecto a la obra que presente: “lectura rápida para un viaje largo” Recuerdo la publicidad que atestaba no hace mucho los canales de televisión ofertando una técnica para la leer (para leer rápido).La garantía de que en tiempo record usted leería un libro, titilaba en colores vivos con marco estrellado y era indiscutible que usted seria el “mejor “en todo.

!El tiempo estaba salvado! para gastarlo en todo menos en leer, intuí que era el mensaje de trasfondo. El libro y el placer de leer habían sido sustituidos por la inmediatez y la maquinación de la lectura. Leer era una carrera a contrareloj y no la aventura de disfrutar un viaje de veinte mil leguas como lo propone Julio Verne, con muchas pausas y estaciones por si aparece la sed. “La solución” si es que existe a quien tenga prisa es el libro para ser leído desde la pausa de la mirada y desde la acción dispositiva.

(1) CARRION, Ulises. El nuevo arte de hacer los libros.

Obra: Jimmy Morales (Estudiante UDI). Sin título. Instalación, 2008.

Exposición Metáforas, Poesía Visual, libro objeto. Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, IMCT, Calle 30 No. 26-117.

martes, 13 de enero de 2009

Exposición: Libro-Objeto







Versiones para otras lecturas
Por. Victor Hugo

Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, un libro es: Conjunto de muchas hojas de papel u otro material semejante que, encuadernadas, forman un volumen (1). Al mismo tiempo que define como objeto a: Todo lo que puede ser materia de conocimiento o sensibilidad de parte del sujeto, incluso este mismo (2). Y es eso precisamente lo que encontramos en la Exposición Metáforas, Poesía Visual, que organizó y curó el Maestro Cesar Chaparro, con la participación del Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, IMCT, y la Universitaria de Investigación y Desarrollo, UDI, durante el mes de diciembre y parte de enero del 2009.

A este evento expositivo fueron invitados los maestros Cesar Rugeles, Walter Alonso Gómez Céspedes, Miguel Ángel Gelvez, Luis Duarte, María Eugenia Jaimes, Julio Cesar Rodríguez y Henry Buitrago.

Igualmente, después de una ardua curaduría de más de 100 trabajos de los Estudiantes de la Escuela de Diseño Grafico de la UDI, donde el Maestro Cesar Chaparro, imparte su cátedra, fueron escogidas las propuestas de Alexis Cuadros, Néstor Barajas, Laura Milena Ortiz, Diego Andrés Gómez, Exneider Díaz, Gerardo Mantilla, Jorge Ricardo Tarazona, Juan Gabriel Lamus, Carolina Bohada, Ingrid Camacho, Jimmy Morales, Jhon Rodríguez, José Lenguas, Melissa Ruiz, Natalia Boadilla, Andrés Jaimes, Miguel Hernández, Marcela Niño, Mauricio Bautista, Mauricio Villamizar, Kevin Ramos, Oscar González, Oscas Sanabria, Tatiana Serpa y María Fernanda Casadiego.

La exhibición
Esta exposición en su concepción curatorial, a mi modo de ver, se planteó un tema de investigación, que se abordó con rigurosidad conceptual y claridad estética.

No obstante, hay que señalar las múltiples dificultades técnicas que se presentan y se deben resolver en cualquier evento expositivo; siguiendo este orden de ideas, en esta exposición Metáforas, se siente la rigurosa intervención del curador del evento.

Por eso, hay que valorar el hecho que el Maestro Chaparro le proponga a la ciudad y a sus alumnos no expectativas sino que construya realidades; de ahí que, asumir la no fácil tarea de desbordar los muros de la academia y saltar la paredilla que divide al conocimiento de la realidad y que mantiene alejado los claustros universitarios del país; a pesar de ello, en esta ocasión, este reto se cumplió con lujo de detalles.

Sin embargo, la puesta en escena de la exposición, si contemplamos el guión curatorial, que no parece ser claro y que contribuye con mantener esa coherencia entre el resultado de una investigación y la exhibición, presenta en momentos algunas debilidades. De otra parte, el hecho de agrupar las obras, no permite que se desarrollen en su espacio y planten un dialogo más insistente con su espectador.

Además, notamos la carencia de la guía para que los visitantes a la Sala de Exposiciones del Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, IMCT, pudieran tener una idea clara de la propuestas curatorial y posibilitará la formación del públicos. Así mismo, las fichas técnicas sólo presentaban el nombre del artista, para quienes no tenían el catálogo, se quedaba sin conocer, aspectos tan importantes como el nombre de la obra.

Por lo demás, excelente. Estos son los retos que el Maestro Cesar Chaparro siempre se propone y de los que siempre nos muestra su capacidad de gestión y realización.

Notas:
(1) [On Line] Diccionario De La Lengua Española-Vigésima segunda edición. http://buscon.rae.es/draeI/

(2) Ibídem.

Obras:
1. Diana Carolina Vera(Estudiante UDI). Sin título. Instalación, 2008.

2. Grupo de estudiantes de la UDI, Escuela de Diseño Gráfico

3. Miguel Ángel Gelvez. Lectura rápida para un viaje largo. Instalación, 2008.

4. Grupo de estudiantes de la UDI, Escuela de Diseño Gráfico.

5. Ingrid Camacho(Estudiante UDI). Sin título. Instalación, 2008.

6. Julio Cesar Rodriguez(Estudiante UDI). Mamaaaaaá se acabó el papellll!. Instalación, 2008.

Exposición Metáforas, Poesía Visual, libro objeto. Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, IMCT, Calle 30 No. 26-117.

lunes, 12 de enero de 2009

Contra el Silencio



Vídeo: Mads Gilbert, medico noruego de la Media Luna Roja. Hospital Al-Shifa de Gaza.

Fuente: http://www.youtube.com/watch?v=Ev6ojm62qwA&feature=channel_page

martes, 6 de enero de 2009

Artes Plásticas y la Universidad -Artículo completo-




Creación e Investigación*
Por. Victor Hugo

Desde muchos puntos de vista se ha definido que es la investigación; sin embargo, voy a tomarme el atrevimiento y el riesgo, para decir que investigar es transformar, es aprehender, es crear conocimiento; es legitimación y apropiación social de las significaciones que hemos construido, que se ancla en un tiempo y en un territorio determinado, abordando imaginarios y sensibilidades, que son atravesados por las variables biofísicas y geomorfológicas donde desarrollamos nuestros procesos sociales como comunidad en la búsqueda de sentidos, identidades y, por qué no, de proyectos conjuntos.

Pero también, es estrategia para la unidad y el desarrollo; así mismo, encuentro y diálogo, línea, vacío, continuum y ruptura; metáfora y dialéctica, signo y polisemia; poética y partitura, expresión y realidad.

La investigación, como metáfora del sueño, se objetiviza hasta el límite de la singularidad, donde Babel abandona lo referencial del diccionario, ese laberinto de palabras que son asoladas por el Minotauro (Toro de Minos) y al que se enfrenta Aridna, quien lleva a Teseo al extremo de la victoria de las significaciones que brotan del caos de la realidad, ese del que nos negamos emerger con las manos llenas de espinas, pero del que finalmente, se logra salir con el hilo de la conjunción de utopías, donde cada territorio es piel y mirada, amalgamada con las cuerdas del universo.

Por último, en la actualidad sabemos que debemos lidiar contra la adversidad de dejarnos abandonar contra el destierro de nuestra propia historia: la sin memoria. De tal forma, que investigación es una provocación que nunca va a la deriva.

La UIS: Investigación y Artes Plásticas

La Universidad es el templo del saber, como dijo el filosofó español y rector de la Universidad de salamanca, Miguel de Unamuno; sin embargo, a la Universidad Industrial de Santander, UIS, dejó de lado la posibilidad generar un espacio para crear una escuela de artes plástica. De ahí que, su olvido alrededor del tema de la creación y la investigación, es el reflejo de una visión reduccionista de la realidad de este oriente.

En lo que respecta a la academia, existe el programa de artes plásticas que ofrece el Instituto Educación a Distancia de la UIS, INSED, donde se hace una importante labor por parte de sus maestros. A pesar de ello, esta alternativa educativa no tiene las mismas garantías y reconocimientos por parte de la Universidad, de la que hoy gozan de las demás ofertas educativas de la Universidad Industrial de Santander. En este aspecto, hay que advertir, que la investigación es sólo una de las 15 condiciones de calidad que debe cumplir cualquier propuesta académica.

Desde esta concepción de academia, se denota su amarga consecuencia: no existe ningún proceso de investigación en artes plásticas que le proponga nuevos diálogos a la comunidad académica y artística de la región y el país. Lo que es más preocupante, es que el programa de artes plásticas del INSED, a cargo del maestro Germán Toloza, ya cumplió 9 años y tiene 122 alumnos graduados, según datos recogidos en la Secretaria General de la Universidad.

En el país

La situación no es muy alentadora, porque a la hora de hacer un recorrido por el Instituto Colombiano para Desarrollo de la Ciencia y la Tecnología (http://www.colciencias.gov.co/) encontramos un total de 2485 grupos de investigación registrados.

Al revisar lo que respecta a la investigación en artes plásticas, el panorama es altamente lamentable, debido a que sólo se encuentran 17 grupos oficialmente reconocidos. Es decir, aún la universidad colombiana tiene mucho por hacer. Lo interesante es que los procesos son relativamente jóvenes, lo que demuestra que empieza haber una preocupación por parte de la academia colombiana en abordar esta materia.

También, es significativo señalar, que en lo referente al tema de la investigación y la creación en artes plásticas, sólo tres grupos del país viene trabajando alrededor de esta compleja línea: Unidad de Arte y Educación, de la Universidad Nacional de Colombia, de Bogotá, L´H, de la Universidad Tecnológica de Pereira, y Investigación para la Creación Artística, Universidad Distrital Francisco José De Caldas, de Bogotá, entre otros.

De otro lado, los recursos destinados para este tipo de investigaciones por parte de las universidades son exiguos. Así mismo, la administración pública y el sector privado, aún les cuesta concebir procesos de indagación desde las artes plásticas, lo que hace que esta labor apenas se empieza abrir pasó en el país.

Por eso, cabe preguntarnos: ¿Realmente existe investigación en el país, es decir, se genera conocimiento que responda a las necesidades tecnológicas y sociales o sólo existe apropiación de tecnologías y modelos? Pero vamos más haya: ¿Para qué la investigación en artes plásticas y de qué tipo de procesos estamos hablando, no será que son metodologías exploratorias que nos sirvan para acercarnos y objetivizar la realidad y nos permita resolver desde lo estético las preocupaciones que abordan los creadores, es lo que necesitamos? ¿Es compatible hablar de creación e investigación en artes plásticas? ¿Acaso se nos está imponiendo una tendencia que se nos viene como una moda de las universidades europeas o el Ministerio de Educación? Estas preguntas quedan planteadas para iniciar un debate al respecto.

Lo regional

Frente a este panorama de la investigación en artes plásticas en el país, en la UIS, aún estamos lejos de iniciar verdaderos procesos continuos de investigación y creación; razón por la cual el departamento este rezagado de la media nacional en este tema.

Al mismo tiempo, debería pensarse en los creadores de la provincia santandereana, que no han tenido la oportunidad de formarse en la universidad, pero que requieren espacios para su profesionalización. Además, en la actualidad, los artistas de las diferentes subregiones del departamento se encuentran, excluidos de los eventos formativos y expositivos que se realizan en Bucaramanga.

De otro lado, en estos días se habla de iniciar los procesos de profesionalización de artistas, proyecto que se promueve desde el Ministerio de Cultura, y que la Gobernación estaba en mora de asumir su liderazgo. En consecuencia, esta sería una valiosa oportunidad para crear una verdadera la Escuela de Arte en la UIS, porque hacerlo por fuera de la universidad, del espacio académico formal, es un riesgo.

Igualmente, es precisó recordar que lo sucedido con la antigua escuela del DICAS, institución de 100 años de historia, que fue acabada por iniciativa del ex-gobernador Juan Carlos Duarte y que termino de cerrar, el también ex-gobernador Jorge Gómez Villamizar; de tal manera, que siempre estaríamos expuestos a los criterios del administrador de turno y a la inestabilidad política regional, ya que en Santander, aún no cuenta con una verdadera política cultural.

Para finalizar, Santander necesita urgentemente su escuela, que posibilite un espacio para el desarrollo, la creación y la exploración de las artes plásticas del departamento y este programa debe ser de carácter presencial, permitiendo así traer docentes investigadores que jalonen y construyan nuevos escenarios para la investigación.

Paul Ramírez-Jonas. Obra: Yo creo como hablo, 2008. Tinta sobre 252 hojas de papel oficio, atril, amplificador, y micrófono. Un conjuro: “Yo creo como hablo”. Materiales opcionales: La voz del público (Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali)..

Juan Mejía. Obra: Preposiciones, Modus operandi, 2008. Collage, papel periódico sobre cartulina y placa de acrílico (Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali). Intervención: Miguel Angel Gelvez y Victor Hugo.

Erick Beltrán. Obra: Sociedad Real del Conocimiento, Royal Science Society, Tablero, tiza, 2008(Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali).


*Este artículo fue publicado [On Line] Esferapublica, Junio 13 de 2008.
http://esferapublica.org/portal/index.php?option=com_content&task=view&id=769&Itemid=2.
Además, en Vanguardia Liberal(Fragmento), el sábado 3 de enero de 2009. http://www.vanguardia.com/diversion/cultura/16776-creacion-e-investigacion

lunes, 29 de diciembre de 2008

CALI ES CALI, 41 SALÓN NACIONAL DE ARTISTAS





La Feria: Arte y Cultura, Definición o Simulación
Por Victor Hugo.

Frente al periodo que se avecina de Ferias que se cruzan por las calles y los caminos del país, nos preguntamos: ¿Qué hay detrás de la ferias? Pan y circo para el pueblo, señalaba el emperador romano.

Nuevamente, es la presencia de las fuerzas del mercado, la tendencia global que intenta acelerar el consumo frente a la actual recesión económica por la que atraviesa el mundo, y en especial, el país, que sigue inmerso dentro la exclusión paulatina de amplias sectores de la población y el marginamiento en la que diariamente crece la pobreza extrema, los altos niveles de necesidades básicas insatisfechas y un grupo humano flotante que habita en las calles, donde hace transito la desesperanza y la violencia.

Por otro lado, está la influencia del mercado sobre la cultura, a la hora de pensar en la Feria, no debería crear asombro alguno. Y es que, desde hace más de una década y bajo lo que llaman hoy, con mucha resonancia y soportado en los conceptos de la escuela del neoliberalismo económico: Responsabilidad Social Empresarial, intentando quedar en tablas, mientras esclavizan nos dan analgésicos para el dolor y emergen entre nuestras cenizas como los altruistas de buen corazón, emulando ejemplos como el de Teresa de Calcuta, que no hubiese sido posible sin la pobreza a la que condenan hasta los libros sagrados, porque resulta que hoy los pobres son necesarios, para el premio Nobel, las condecoraciones de la ONU y del Congreso de la República.

Pero, esta concepción de la Responsabilidad Social Empresarial no es más que otro mecanismo comercial de las corporaciones y conglomerados económicos, quienes recorren el país, disputándose el territorio colombiano para ofrecerse como patrocinador de las festividades populares, festivales, bienales y concursos, etc.; de esta forma, estos emporios han sido los responsables de generar valores artísticos, amarrados a la elasticidad de la oferta y la demanda; además, de imponer los patrones de diversión, entretenimiento y crear estéticas que están definiendo, de alguna forma, la producción artística colombiana.

El Vallenato
Con sólo observar la industria fonográfica del país, podemos avizorar como se ha montado todo un sistema de explotación de ritmos musicales autóctonos, que como el vallenato, creo una subcultura, que en la actualidad está asociada a una estética que promueve una cosmovisión del mundo conformista y, en momentos, medio agónica de lo que significa el amor desde la perspectiva del hombre, que intenta vender sus afectos a partir de pobres y primarias metáforas.

Vallenato, que dicho se ha de paso, ni siquiera alcanza hacer folclor, porque según el Patronato de Artes y Ciencias del país, define como folclórico cualquier manifestación cultural que se mantiene en el tiempo por un periodo de 100 años, y esta aún no los tiene.

De otro lado, el vallenato que se escucha en las ferias del país, defiende una postura ideológica desde el establecimiento, su statu quo; pero también, hay que recordar que hizo parte de las primeras bonanzas económicas del país: la marimbera, de la que gozo el Mandato Claro de Alfonso López Michelsen; vallenato que paso de la vereda a los salones del jet-set criollo y, alcanzó escenarios tan significativos como los de la Casa Blanca, la de Clinton y la de Bush, en el peor de los tiempo que ha vivido el mundo.

Sin embargo, en la actualidad, el vallenato se vende en las estaciones radiales asociado a la ranchera y los corridos mexicanos: “ranchenato” lo llaman, y esta tendencia musical expresa en toda su magnitud la barbarie que se pasea desde el Congreso de la República, la Casa de Nariño y por cuanto camino de vereda hay en el país, y que no es más que la manifestación de las historias de horror en la que estamos sumidos los colombianos por efectos del narcoparamilitarismo y el juego del poder.

Feria y Simulación

Frente a estas realidades, es claro que a los diferentes sectores económicos les interese mantener dentro de su plut de caja un rubro específico para el apoyo, promoción y publicidad de las ferias del país, que por partida doble, les genera exención de impuestos, mercados y posicionamiento de marca, lo que se convierte en un negocio con mínimo riesgo y una tasa de retorno que multiplica exponencialmente cualquier inversión, en medio de una economía, que en los últimos siete años creció sin generar un solo empleo estable, como lo muestran claramente las cifras macroeconómicas.

Por eso, la feria no es más que un mercado para el posicionamiento, la distribución y un mecanismos marketing que esta guiando los intereses de las grandes empresas, los medios de información privados, sectores privilegiados e institucionales, quienes se lucran de la alta rentabilidad, presentando los productos artísticos como un sello de marca, mientras que los mass media continúan leyendo el guión que desde las oficinas de prensan les diseñan las multinacionales y la Casa de Nariño.

Desde esta perspectiva, es fundamental abordar la realidad para explorar y reflexionar sobre cómo el mercado estructura, organiza, dirige la producción y el consumo de la cultura y el arte. De tal forma, que para ninguno es un secreto la influencia crecientemente, de las nuevas tecnologías de la imagen y, por otro, del valor agregado de amplia margen de ganancia que deja el ejercicio creador y su producción, cuando está inmersa en los mercados.

"Cali es Cali", la obra

Hoy prefiero a la Cali que es Cali, la de la Salsa multitonal, bellamente soñadora, absolutamente propositiva a los cuatro vientos, donde se corean las ganas y no se disimula el sudor que provoca el aliento, donde se expresa la libertad de un baile que se despliega armónicamente en las figuras que intentan atrapar la sensualidad del espacio y jugar sin la simulación del que espera.

Por eso, prefiero a la Cali que es Cali, la de la Salsa multitonal y no a la Cali que amalgaman con el vallenato sinuoso, de pasos que se esconden detrás del cuerpo, que disimulan la cadencia y buscan la sensualidad de una música pobre en expresiones y sin diversidad alguna. Que lastima, que hasta en eso hayamos perdido la identidad, porque Cali era expresión de Salsa, del pacifico, y no el eclepticismo sonoro del vallenato que nada tiene que ver con nuestro folclor, sino que se propone como un mecanismo más de adiestramiento y un estética para el control social.

Por eso prefiero a la Cali de Aguaelulo, de champús y pan de bono; la de Juanchito y sus casetas de guadua de los años 70´s donde los niños iban a observar por las rendijas a los salómanos para aprender nuevos pasos; La de Macumba, Padilla y Chango. Pero, también, la de Monca Monca, El Infierno y El Escondite. Esa que esperaba la rumba de los domingos en Agapito, El Pailón, Don José, Monterrey, Tropicana, La Playa y La Cita, esa que se reunía en la complicidad de la tarde en el Parque de La Caña. La Cali que enamora y donde las mujeres no son como las flores sino que son las flores. Prefiero la ciudad a la que le canta Teo Ramos en sus calles, la que se resiste, la que no miente como El Occidente, la que no es conservadora ni esclavista, donde el pacifico recuerda a sus ancestros porque en esa Cali es donde: “Que Viva la Música”, la de las andanzas de Clarisolcita, la bella. No la del falso eclecticismo impuesto por los medios de información para garantizar su raiting y los contratos de publicidad.

De ahí que, pan y circo para los colombianos en estas ferias, donde no es extraño encontrar un apasionado del vallenato escuchado su música y echando tiros al aire, al tiempo que suenan sus corridos mexicanos. Esta cotidianidad habla mucho de la estética que le fabricaron a los colombianos las multinacionales de la cultura, la diversión y que hace eco en las emisoras del país.

Mientras que, la obra Cali es Cali, es la vigencia de una bella historia, la de la Familia Angulo. La instalación, que se exhibe en el 41 Salón “Nacional” de Artistas, es de la maestra Liliana Angulo, pero en el video son protagonistas los de la vieja guardia, nuestro último bastión que defiende la identidad, Leonor Moreno, madre de la artista, y Jhon Humberto Angulo, su hermano, quienes nos muestran la posibilidad, no de recordar el pasado sino de reivindicar este presente de que Cali es Cali.

A Ezequiel Romero(Cheque),
Con quien disfrute escuchar Salsa en Barrancabermeja, nuestro eterno bibliotecario y contador de historias, uno de los pocos que dejaron morir de viejo.


Liliana Angulo. Obra: Cali es Cali, 2008. Instalación, video, sonido y fotografía (Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali). Fotografía: ©Hugsh, 2008. Cali Es Cali, 41 Salón Nacional de Artistas.

sábado, 27 de diciembre de 2008

Fotografía monocromática








Taller de Cianotipia
Por. Victor Hugo.

En el segundo Taller que realizamos con el maestro José Ángel Mora Robles en el Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, en el marco del Proyecto Cartografías al Límite, trabajamos la técnica de la Cianotipia, o proceso fotográfico monocromático.

Un poco de historia
La cianotipia es un proceso creado en 1842 por el astrónomo y químico inglés Sir John Frederick William Herschel (1792-1871). Fue en 1819, cuando Herschel descubrió el poder solvente del hiposulfito de sodio en torno a las sales de plata insolubles, estableciendo un precedente a su utilización como un agente fijador en la fotografía. También, es el primero en aplicar términos como "positivo" y "negativo" a las imágenes fotográficas. Sin embargo, es Anna Atkins (1799-1871), científica británica, la que utilizó esta técnica como fotografía.

En sus orígenes, la cianotipia consistió en impregnar el papel con sales de hierro para posteriormente ser utilizado en impresión de contacto. Al lavar el papel en agua surgía la imagen en blanco sobre un fondo azul prusia. La cianotipia, también conocida como "blueprint" (copia azul), generalmente se destinó a la realización de fotogramas durante el siglo XIX.

Utilizamos
-50 cc. de agua
-Citrato de hierro amoniacal (10 grs.)
-Ferricianuro de potasio (4 grs.)
-Papel acuarela

Cómo lo hicimos
Se mezcla el Citrato de hierro amoniacal al agua, revolviendo constantemente durante la disolución y este completamente disuelto. Luego, procedemos a agregar, el ferricianuro de potasio a la solución, inmediatamente se torna una solución fotosensible.

Posteriormente, a un papel, preferiblemente resistente al agua (se recomienda el acuarela), se vierte uniformemente la solución y se pone a secar, al tiempo que se recomienda hacerlo en un cuarto oscuro. Nosotros por ganar tiempo durante el taller usamos y secador de pelo.

Inmediatamente, después de tener seco el papel, procedemos a colocar sobre él aquellas cosas que queremos fotografiar, preferiblemente objetos a los que se le pueda colocar un vidrio para hacer presión sobre ellos y generar mejor fijación.

Seguidamente, la imagen positiva se produce exponiendo nuestro papel a una fuente de luz ultravioleta, la luz solar, entre los 10 a 20 minutos, lo que depende de las condiciones de luminosidad a la que hagamos la exposición. Finalmente, cuando el papel se torne de color gris oscuro, se procede a pasa por agua limpia, con el fin de lavarlo y fijar la imagen.

Finalmente, para aumentar el contraste de nuestra imagen es recomendable pasarla por agua oxigenada y para bajarlo por una solución de agua con vinagre.

¡Ahora a trabajar!

Casa del Libro Total: Recuperación de la memoria visual de Santander




Apuntes críticos sobre la curaduría
Por. Victor Hugo

Es innegable que el Proyecto de la Casa del Libro Total es una apuesta a la cultura de la ciudad y sea convertido en parte del patrimonio santandereano. Por eso, bienaventurada sea la palabra y la restauración de un espacio tan significativo, que es testimonio de la historia de Bucaramanga.

Esta propuesta liderada por (Sic) Editorial Ltda., que hace parte de la iniciativa privada de la empresa santandereana Sistemas y Computadores S.A., muestra un cambio substancial dentro de la participación de los empresarios de nuestra región en los distintos proyectos culturales, que tanto gestores como creadores venimos jalonando en el oriente colombiano y que necesitan de la sinergia y la proactividad de los diferentes sectores sociales y gubernamentales del Departamento, porque hasta el momento son exiguos, pero eso sí fructíferos.

De tal manera, que no nos queda más que celebrar al unisonó el valioso aporte que la hace a la cultura Sistemas y Computadores S.A., con este magnífico proyecto del que nos iremos apropiando los santandereanos.

En la actualidad, la Casa del Libro Total, nos ofrece tres(3) Salas de Exposiciones, dos(2) Salas de Lectura y un escenario central, para todo tipo de eventos culturales. Además, en el link www.ellibrototal.com encontramos 959.898 páginas virtuales, que amalgaman lo mejor de la literaria universal y regional, que crecerá indudablemente con el empeño y el denuedo de sus creadores.

Sobre Curaduría

La Casa del Libro Total, viene haciendo un esfuerzo sin precedentes, con el fin de recuperar y preservar la memoria visual de Santander. De tal forma, que cada mes nos presenta una exposición de los Maestros santandereanos, que le han aportado un importante legado a las artes plásticas y visuales del Departamento. Este proceso, que incluye la digitalización de la obras, con el fin de preservarlas el patrimonio visual de los santandereanos.

Sin embargo, y a pesar de la titánica labor, no se nota una curaduría que proponga una investigación de manera clara, ordenada y creativa en el montaje y la producción de las exposiciones.

En este punto quiero remitirme a las precisiones que hace la curadora y crítica de arte colombiana, Carolina Ponce de León, en su libro “El Efecto Mariposa, Ensayos Críticos sobre el arte en Colombia (1985-2000)”:

“La labor de un curador de arte consiste en crear las condiciones propicias para que la producción artística sea legitimada como parte de una experiencia cultural colectiva.

Por eso, técnicamente, el oficio de un curador consiste en organizar exposiciones. Para ello reúne una selección de obras de arte, documentos y conceptos con los cuales crea un espacio conceptual artificial determinando por un montaje físico de las obras y por ayudas pedagógicas. Tal como la producción artística misma, una exposición es una forma de comunicación paradójica. En el mejor de los casos, es un medio de intercambio mediante el cual el público experimenta a través del arte aspectos de su propia dinámica cultural. El curador en una exposición puede insertar lo incierto del hecho artístico dentro de concepciones tangibles, estableciendo analogías, referencias históricas, clasificaciones, narrativas, o, por el contrario, puede entremezclar diferentes visiones artísticas con conceptos que van más allá de la lógica, estableciendo nexos “abiertos” o lúdicos que no son conclusivos. La curaduría establece una alianza con el trabajo artístico para consolidar un espacio de reflexión.

En términos generales, organizar una exposición consiste también en formar un público. Esto implica vencer los prejuicios que reducen a las exposiciones a ser eventos exclusivos para públicos “conocedor” y elitista. Hay que estar pensando permanentemente en cómo fomentar relaciones más dinámicas entre el arte, las instituciones culturales y la sociedad.

Es preciso “erradicar la percepción banal y estéril de que el arte es sólo cuestión de clase, estilo, inspiración, y genialidad. Y estos mitos no son poco ni pequeños: desde las ideas clasistas sobre qué es cultura legítima (y por lo tanto, quien la hace casi siempre tiene apellido conocido y sonoro), hasta los cánones de armonía, belleza, buena factura, y buena familia de los cuales depende generalmente que se les dé reconocimiento a los artistas"(1) .

Por las Salas

En primer lugar, formularse la circulación de una exposición, aparte de la investigación que se plantea, es un hecho que se debe pensar; quizás, es uno de los primeros retos a resolver de un proyecto de diseño de una exhibición y este tiene que ver con lo orgánico y constante de la naturaleza de todo evento expositivo, por lo que requiere un análisis previo y un diseño de un guión.

En este punto, el diseño, debe considerar distintas fases y abordar posibilidades para atrapar y propiciar en el público una experiencia singular y un acto de reflexión; por eso, el curador puede ofrecer diferentes momentos que se expresan a partir de los formatos, color y de la comunicación textual. Es decir, en todo el proceso de producción y durante la exposición dotarla de sentidos, lecturas, pero también ofrecer rupturas, que dependen de cada proyecto en particular.

De otro lado, cuando pensamos en una retrospectiva, tal vez, nos ponemos en el lugar del artistas, lo que implica partir de su producción y esto responde a lo que él quiere decir, lo comunica, al mismo tiempo, al momento donde se produjo la obra, que no es más que su contexto.

Desde esta perspectiva, la curaduría es un ejercicio creativo de investigación que consiste en hacer visibles espacios para la exhibición de piezas u obras de arte, proponer lectura y propiciar formación de públicos. Y eso es lo que se no se da en las exposiciones retrospectivas de la Casa del Libro Total.

De tal manera, que frente a esta lecturas que hemos podido apreciar en las dos exposiciones que hemos tenido la oportunidad de visitar, la de los maestros Martín Quintero Pacheco y Mario Hernández Prada, el público encontró una serie de cuadros desordenados y que se tranzan en una disputa por retener, por un instante, la mirada del espectador que entra a las Salas de Exposiciones.

No se trata de exhibir por exhibir, tratando de agotar la paredes de las Salas que se derriten frente a la mirada y que tensionan el acto sublime de la observación, que entre otras cosas es una exploración activa y dinámica de un espectador, conocedor o no, que intenta indagar por lo que tiene frente a sus fuerzas perceptivas, que se devoran así misma, captando lo esencial o deteniéndose en las infinitas de lecturas que nos ofrece un artista.

Igualmente, las obras, apiladas, arrinconadas y en esa disputa por el espacio, generaban rupturas en su equilibrio, peso y su dirección. En este aspecto, es fundamental que las obras dialoguen y le ofrezcan a su observador un encuentro, con el que aprehenda del artista, de sus procesos y periodos de forma ordenada y clara. No obstante, sino no hay una línea continua, porque es la intención curatorial, se debe generar las condiciones necesarias para que el diletante pueda llevarse una visión del contexto de la obra o los soportes conceptuales que influyeron en la vida del artista. De igual modo, las fichas técnicas de las obras estaban mal elaboradas y no ofrecían una verdadera información al público sobre la propuesta plástica.

También, hay que señalar, que no existía ningún soporte pedagógico, fuera de un boletín, Nos. 6 y 8, y la visita guiada; no obstante, aparte de estas posibilidades, una retrospectiva debe ofrecer una puesta en escena, con la intención que se traza su curador y se exhibición al público con un texto, que hace parte de su investigación, elaborada a partir de un libreto curatorial, que da cuenta de su propósito y nos ofrece un correlato de la muestra, en la que se soporta una mirada sobre la vida y la obra del creador.

A parte de esto, una evento expositivo contempla, una serie de eventos alternos que ofrecen una gama de posibilidades pedagógicas al público y vuelva atractiva la muestra.

Para concluir, este proceso que empieza, nos va a ir dejando grandes dividendos para las artes plásticas de Santander y a sus creadores. También, nos resta manifestar, que todas las exposiciones que se dan en la ciudad, son importantísimas y nos queda a los creadores, generar un espacio para la crítica que contribuya al desarrollo del quehacer curatorial, se convierta en un escenario para el dialogo, fortalezca nuestros procesos de formación y promueva la investigación, en un campo que apenas comienza a abrirse paso en el Departamento.

Exposición Retrospectiva del Maestro Mario Hernández Prada. Casa del Libro Total: Calle 35 No. 9-81. Abierta al público de lunes a sábado de 7:00 am a 9:00 pm. Bucaramanga.

(1)PONCE DE LEON, Carolina. “El efecto mariposa. Ensayos sobre arte en Colombia 1985-2000”. Instituto Distrital de Cultura y Turismo de Bogotá, Gerencia de Artes Plásticas. Segunda Edición, noviembre de 2005. Págs 29-31.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

A parte de criticar el 41 Salón Nacional de Artistas




Taller de fotografía: Nuevas miradas
Por Victor Hugo
El pasado 17 de diciembre en Bucaramanga, el fotógrafo venezolano José Ángel Mora Robles, realizó un Taller de fotografía, en el marco del Proyecto Cartografía al límite: Proceso de formación de artistas y creadores plásticos como ejercicio de integración binacional. Esta iniciativa regional es apoyada por el Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, la Secretaria de Desarrollo Social y Económico de Barrancabermeja y el Ministerio de Cultura.

Esta fue una nueva oportunidad para que los creadores bumangueses nos encontráramos y continuáramos los procesos de formación e investigación que vienen siendo apoyados decididamente en la región por las Alcaldías de Bucaramanga y Barrancabermeja.

En esta primera parte del Taller, el artista plástico tachirense, abordó el desarrollo de la fotografía y su contribución a la ciencia.

Igualmente, el día 18 de diciembre en la ciudad de Barrancabermeja realizó un ejercicio de fotografía urbana y abordaje conceptual de la escritura con luz.

Microcurrículo del Maestro José Ángel Mora Robles:
Fotógrafo autodidacta con más de 35 años de experiencia. Licenciado en Comunicación Social, Mención Periodismo Científico, ULA. Ponente en simposios y congresos de fotografía a nivel nacional e internacional. Ha realizado múltiples exposiciones en diferentes ciudades del territorio venezolano y fuera de él. Su obra está representada en museos locales, nacionales y extranjeros. Instructor de fotografía para el Centro Nacional de Cinematografía, el Instituto de las Artes de la Imagen y el Espacio, la Universidad Nacional Experimental de las Artes y la Universidad Nacional Experimental del Táchira. Astrónomo y meteorólogo aficionado. Activista ambiental contra la contaminación luminosa y el calentamiento global.

(Conferencia e instalación del evento, Sala de Conferencias IMCT. Participó el Director del Instituto Municipal de Cultura y Turismo de Bucaramanga, José Alcides Cortes Peñuela)

De Natividad e imagenes


En esta Natividad regala:
Tu mejor mirada, tu palabra tierna,
la sonrisa de tu piel, la fuerza de tus manos,
el gesto más bello, tus sueños a un niño
y tu incansable compromiso por un nuevo día.


Puerto de Barrancabermeja, diciembre 18 de 2008.

domingo, 14 de diciembre de 2008

41 SALÓN NACIONAL, A LA SAGA: DEAMBULANDO POR LOS BARRIOS DE MI CIUDAD

 
En pocas palabras  
Por. Rafaela Gómez

Señora Laura Barrientos:

Estoy acabando de colgar en mi ventana parte de mi vida, pero no sé si esta es mi vida.

Sabe, es una tarde de domingo, en la que los trapitos no salen al sol, en la que celebramos la Inmaculada Concepción, y coloque en la puerta de mi casa la bandera de la Virgen, porque la de Colombia en las fiestas patria me da miedo sacarla no va y sea que me cueste la vida; porque en mi barrio el tricolor no se sabe aún a que bando pertenece desde la campaña del presidente Álvaro Uribe Vélez, aunque yo vote por él. Se veía tan lindo.

Ahora lo único que veo es la mano firme que nos mantiene en la pobreza y su corazón blando con quienes se llevaron muchos niños del barrio para después aparecer en las fosas comunes, eso que le llaman falsos positivos o como nos dijo el abogado ejecuciones extrajudiciales; como la del hijo de Doña Toña, que aún se niega a ser un muerto más para nosotros, el fue encontrado en Ocaña con una bala en la cabeza, vestido con prendas militares y botas de un número menor al que calzaba.

Imagines usted, como debería un muchacho andar si su número eran 41 y las botas de caucho con que lo mandaron a ese hueco eran 38. Lo recuerdo bien, porque acompañe a su mamá hasta Ocaña. Quien más sino yo, que soy una madre cabeza de familia con dos bebes y que por semanas no consigo que hacer, pero mis vecinas me ayudan y de vez en cuando me mandan la media libra de arroz y los $500 pesos de aceite para que comamos con mis niños.

Señora Laura, el señor Victor llegó a mi casa con la cámara y me dio desconfianza, pero me mostró su ropita colgada en un puente, dizque era una obra de arte. Francamente me reí mucho. Debiera venir a mi barrio y para que se diera cuenta de las miles de obras que tenemos para mostrarle. Eso de la policía lo entiendo, porque ellos siempre andan ofendidos con nosotros. Cuando pasan por el frente de mi casa me miran feo, no sé de que sospechan de mi, pero sospechan.

El señor Victor, dijo que su ropita era una obra de un Salón de Artista, déjeme decirle, que no he visto eso en las noticias y que lo que más me entretiene son los chisme de los artistas, pero no he visto nada de esos artistas a los que usted pertenece. Me da risa, es que si usted es artista con esas ropas y no se le ocurrió más que colgarla en un puente, por eso salieron los del CAI enseguida. No se de que artista es usted.

Pero el señor me dijo que le escribirá algo para ponerlo en internet y yo lo acompañe a la sala de computadores del barrio para que lo hiciera, pensé que me estaba mamando gallo; además, pude ver la fotografía de mi casa ahí y me pareció linda con ropa y todo. Así que escribí algo para usted. Es que esas cámaras ya no son las de antes, toman una foto y las podemos ver de unas.

Bueno señora Laura, creo que me alargue, yo la invitaría a mi barrio para que tomara las obras que tenemos colgadas en las ventanas y nos riéramos juntas de eso que ustedes le llaman arte.

 Fotografía: ©Hugsh, 2008. “Trapitos en mi ventana”. Barrio Café-Madrid, Ciudad Norte de Bucaramanga. Referencia a la obra de la Maestra Laura Barrientos, “Trapitos al Sol”. 41 Salón Nacional de Artistas, Urgente-Cali.

sábado, 13 de diciembre de 2008

EN CALI, 41 SALÓN NACIONAL, ELÍAS HEIM: LA VIDA CRISTAL


Lo que no nos pertenece
Por. Victor Hugo
“Nada de lo que se creía superado por la historia ha desaparecido realmente, todo está ahí dispuesto a resurgir, todas la formas arcaicas, anacrónicas, como los virus en lo más hondo de un cuerpo, La historia sólo se ha desprendido del tiempo cíclico para caer en el orden de lo reciclable”. Jean Baudrillard
“Por un lado nos encontramos con los apocalípticos y por el otros a los evangelistas. En más de un sentido el progreso técnico se ha presentado como el sucesor de las religiones reveladas. Salvación y condenación, bienaventuranza y maldición, es algo que, desde la Ilustración los augures ya no leen en las Sagradas Escrituras sino en las entrañas de la civilización técnica”. Hans M.Enzensberger
Deambulando entre el sonido del cristal golpeado por el suelo, recordé el magnífico horror de la gravedad y las formulas de la “Principia” que Newton nos enseñó; no obstante, por la inercia del último Salónacuesta, después de la larga marcha que no nos daba posibilidad alguna de detenernos sino que nos devoraba entre sus espacios de paredes livianas de historias y curtidas por el tiempo, entre los gritos que susurraban y anunciaban el irrevocable día del rosario de mayo en la Sagrada Familia, cometimos el concupiscente atrevimiento de entrar a la casa de Elías…

Al escuchar el sonido de casa, en ese instante se quebró un objeto de cristal, que premeditadamente el artista tiraba frente a los medios de información para que hicieran la toma de un hecho en tiempo real; entre tanto y en off, un observador me preguntaba cuanto podría costar el preciado artefacto, que sin compasión alguna fue derribado de su estante para que la inclemente cámara capturara la intensión; mientras que, recordaba las historias que la Metro Golden Mayer, y todos los largometrajes de la productoras de Hoollywood, fundadas por el capital judío, nos han vendido con su visión reduccionista de la cultura judeocristiana occidental.

Cuando regrese al lugar, la intensión del sonido que golpea incesantemente ese curtido piso de microhistorias, que algún día pasaron inadvertidas, pero que en se callaron en los salones de la Sagrada Familia; pensaba en las historias y la impunidad que reina en el país, por ejemplo: la del exmilitar y mercenario judío Jair Klein, ampliamente recordado en el magdalena medio colombiano.

Esas mismas historias de impunidad, que no golpean el piso con el cristal porque tienen 500 años de esclavitud que encadenaron a los afrodescendientes y que aún siguen condenados al feudalismo de la sociedad vallecaucana. Ellos, los esclavos, eran castigados cuando por el nerviosismo de tener entre sus manos un cristal traído de las frías y gélidas Europas, terminaban deslizándose como por arte de Chande entre sus ásperos dedos.

Después de este hecho, venía el garrotazo blanco y el calabozo seguro… Así, como condenaron los judíos al pueblo palestinos, cuando por mandato de su dios un día invadieron a su país. Conocedor poco de la historia, me pregunto cuántos misiles e incursiones del ejército judío a terminado con las vidas de las mujeres, niñas, niños y jóvenes palestinos.

Simplemente la historia está ahí… Esa que no aprendí por efectos de la incapacidad de mis profesores, pero que hoy no permite negociar con el redentor ni esperar en la sinagoga ni en iglesia alguna a que llegue el verdadero Mesías… Aunque no estudie en ninguna academia sólo intento observar la realidad… Quizás me hizo falta estar en un Kibuc.. o ir a The Bezalel Academy of Arts and Desing, de Jerusalén.

Hoy todos sabemos que la historia es incontenible y los hechos están ahí servidos en la mesa en la que no voy a comulgar… Aunque Hoollywood y la CNN, del judío Tin Turner, nos siga manoseando y escondiendo la verdad. Por eso, yo no prefiero el fino aliento de dios para que me de la vida… No, no soy la botella… ni estoy hecho del cristal, ni espero como su reloj, la presencia del redentor, el mesías guerrero que después de 5769 años nos viene a asaltar o a salvar.

Por eso, cada año mientras los israelitas celebran su Rosh Hashaná, diariamente somos asaltados por Walll Street que está en manos de los capitalistas y especuladores judíos. No… no más simulación, el arte es la poética de la realidad, no es la realidad significante con que nos muestran la ficción metafísica de un pensamiento que se alindera, en sus mínimas metáforas y que reitera en la negrilla espía lo que la Torat y sus cábalas siempre han tratado de descifrar. No, soy esta tenue realidad, un instante del tiempo que se contradice con su antimateria y el flujo de unas cuerdas que hoy ni siquiera me llaman al despertar.

La intervención

Frente a este alud de significaciones de "Trümmerfrauen", espontáneamente y con la complicidad de un artistas de la zona oriente, entre la corazonada limpia, en medio del Buffet vacio y estruendoso, de la obra premonitoria del Elías Heim, intentamos cuestionar desde la esencia el material ideológico de la que estaba construida la propuesta. De ahí que, su vaso desechable señala más la contradicción de la contemporaneidad, que la simplicidad interpretativa con que sueña la polisemia cuando se hace singular en la primera persona de la conjunción del pensamiento: yo.

Este acto, de irreverencia regional, no hace puntos suspensivos sobre la intención del 41 Salón “Nacional” de Artistas, sino que se reitera, hasta la saciedad del que no fue invitado, y que observa a través de la reja, la opulencia de una fiesta que dejo de lado la posibilidad de construir una verdadera noción del arte en el país, leído en la marginalidad de la región, desde donde se arquitecta hoy otra fe.

Fotografía: ©Hugsh, 2008. Superposiciones. Intervención sobre la obra de Elías Heim. Trümmerfrauen. Colegio la Sagrada Familia, calle 3 oeste No. 3-21, Cali.